La ciudad sostenible 100%: Burlington

25 Noviembre 2019 - Actualizado 31 Enero 2024
Ciudad de Burlington, ejemplo de sostenibilidad urbana.

Burlington es la ciudad más poblada del estado de Vermont. Y es famosa en todo el mundo por convertirse en la primera localidad que abastece a más de 40.000 habitantes exclusivamente con energías renovables. ¿Quieres conocer el alcance de este proyecto? En la entrada de hoy vamos a hablar del cuidado del medio ambiente en Estados Unidos. Veremos cómo funciona el modelo de ciudad sostenible. Y finalmente analizaremos los logros conseguidos en Burlington. Sin duda alguna, una experiencia inspiradora para el resto de países.

Cuidado del medio ambiente en Estados Unidos 🇺🇸

Durante el mandato de Barack Obama, se llevaron a cabo numerosas políticas ambientales en suelo estadounidense. Una regulación que afectaba sobre todo a las emisiones de los vehículos y los altos niveles de azufre detectados en la gasolina. Sin embargo, la administración de Donald Trump ha cambiado por completo esta realidad. Ya que, entre otras cosas, niegan el calentamiento global.

Con el objetivo de impulsar la industria y crear hasta 3 millones de empleo en 2020, Estados Unidos se aleja por completo de la tendencia que había encabezado hace una década. Ya ha abandonado el Acuerdo Climático de París que ratificó en 2016. Por lo que no tiene ninguna intención de reducir sus emisiones contaminantes en el futuro.

¿Cuáles serán las consecuencias?

Algunos expertos estiman que el nuevo rumbo de las políticas norteamericanas supondrá la muerte de 8.000 personas cada año. Y los problemas respiratorios podrían afectar a más de un millón de ciudadanos en la próxima década. Especialmente niños. No es la única medida adoptada. Además de una importante reducción en los presupuestos medioambientales, se han eliminado las órdenes ejecutivas que protegían sus costas o velaban por la calidad del agua.

Todo esto ocurre al mismo tiempo que se aprueba la construcción del oleoducto Keystone XL, que desde el inicio ha estado lleno de polémica. Se trata de una enorme estructura de 2.000 kilómetros de longitud que permitirá transportar el equivalente a 800.000 barriles de crudo diario. Y supone un jarro de agua fría para los que apostaban por un futuro basado en las energías alternativas y limpias.

El modelo de ciudad sostenible

Por suerte, el modelo de ciudad sostenible sigue teniendo vigencia en territorio norteamericano y a nivel internacional. El principio es muy simple: suministrar a los habitantes la mejor calidad de vida posible. Haciendo un uso responsable de los recursos disponibles para que las próximas generaciones hereden un mundo donde merezca la pena vivir.

De esta forma, podremos superar los problemas de la superpoblación y el consumo desmedido. La contaminación del planeta y otras situaciones sociales y económicas como la desigualdad. Reforzando el compromiso de las ciudades para proteger el medio ambiente y el bienestar de las familias que residen en ellas.

Características de la ciudad verde

Una de las características principales es que permite el libre acceso a todos los recursos básicos. Desde una educación gratuita y de calidad, pasando por transporte público limpio o centros de salud. Sin descuidar la seguridad y todos los elementos indispensables para nuestro día a día habitual.

Las ciudades sostenibles también requieren la transformación del espacio urbano. Es decir, que tenemos que adaptar las calles y edificios a todo tipo de personas con movilidad reducida. Indicar las direcciones en distintos idiomas, para que todo el mundo se sienta integrado. Y también desarrollar la arquitectura bioclimática en sintonía con la naturaleza.

Y finalmente, tenemos que hablar de la reducción de las emisiones contaminantes, especialmente el CO2. Para ello, las ciudades ecológicas del futuro apostarán por fuentes de energía limpias y renovables. Como es el caso de la eólica, la geotérmica o los paneles solares. Con vehículos accionados por motores eléctricos y la proliferación de bicicletas, que además nos permiten hacer ejercicio y son muy beneficiosas para cuidar la salud.

Burlington

Burlington es posiblemente el mejor ejemplo de ciudad verde y sostenibilidad ambiental en todo el mundo. Esta población situada en el estado de Vermont se convirtió en 2014 en la primera ciudad 100% limpia y renovable del país. Desde entonces, sus 42.000 habitantes se abastecen exclusivamente de energías no contaminantes.

calle principal

Como te puedes imaginar, un proyecto tan ambicioso no se consiguió de la noche a la mañana. Burlington recibía el suministro eléctrico de una central nuclear cercana. Por lo que hicieron faltas numerosas iniciativas políticas y un gran esfuerzo económico para lograr la independencia. Trabajo que llevó más de 20 años en completarse. ¿Y cuál fue el resultado?

Sostenibilidad ambiental

En la actualidad, Burlington autogestiona su producción y consumo energético. Un 45% de la energía utilizada proviene de la biomasa. Un 30% de las centrales hidroeléctricas. Un 24% de las instalaciones eólicas. Y tan solo un 1% de la energía solar. Además, sus habitantes han cambiado por completo la mentalidad sobre temas ecológicos.

Están mucho más interesados en saber cuánto consumen, por lo que han instalado contadores inteligentes en sus casas para detectar los electrodomésticos que gastan más. Y tomar medidas para contrarrestarlo. También han cambiado sus hábitos. Prefieren los productos ecológicos, evitando comprar aquellos que vienen en envases de plástico. Y sus coches están impulsados por motores eléctricos que no son contaminantes.

Por lo tanto, utilizar las energías sostenibles ha dejado de ser un simple modelo de consumo para transformarse en el estilo de vida de los habitantes de Burlington. Y no pienses que se quedaron con los brazos cruzados.

Tras convertirse en la primera ciudad 100% limpia y renovable de Estados unidos, el siguiente objetivo fue alcanzar la energía neta. Es decir, la reducción de la electricidad necesaria para calentar e iluminar los hogares. Algo que han conseguido recientemente. Situándose en un 4% menos que en 1994 pese al importante incremento de habitantes y consumo.

Artículos relacionados