El suministro de agua en algunos puntos del planeta supone un coste económico desorbitado, motivo por el cual los especialistas han estado buscando durante años un sistema que les permita reducir los gastos y ayudar a las personas que viven en dichos entornos. Waterseer es la respuesta a este problema, un dispositivo capaz de extraer agua de la atmósfera gracias a la condensación. En esta entrada vamos a descubrir cómo funciona y hablaremos de sus principales ventajas.
Se trata de un aparato de diseño muy sencillo y con un precio asequible para cualquier bolsillo. Proporciona 37 litros de agua potable cada día, por lo que juntando varios Waterseer podríamos abastecer sin problemas a una comunidad. El objetivo es que estos dispositivos estén presentes en las zonas donde más necesaria es el agua, bien por tratarse de un clima muy árido o por la inexistencia de infraestructuras.
Allí donde el suministro de agua no puede llegar o supone un gasto imposible de asumir, Waterseer es una excelente opción a nuestro alcance.
Waterseer puede obtener agua potable sin necesidad de una toma externa de energía y tampoco hace falta utilizar productos químicos. Es un sistema ecológico, sostenible y con un mantenimiento mínimo. Se instala fácilmente y no produce gases tóxicos que podrían tener consecuencias negativas en el medio ambiente, por ejemplo, provocando el efecto invernadero.
Pero, ¿Cómo funciona exactamente Waterseer? Hay que anclar el aparato dos metros en el suelo para que comience a extraer agua de la atmosfera mediante condensación, que se produce por la diferencia de temperatura en el aire y el suelo. En la parte de arriba encontramos las aspas del ventilador de la turbina eólica, que se encarga de enviar el aire a una cámara subterránea fabricada en metal. Este material se enfría en contacto con el suelo, transformando el aire en vapor de agua.
Este vapor se condensa en los lados de la cámara y a continuación el agua resultante es dirigida a un deposito, desde donde se puede extraer cómodamente con una bomba de agua y una manguera. Debido a que los lados de la cámara subterránea están más fríos que el aire que entra, la producción de este recurso vital se mantiene durante el día y la noche, incluso en las horas que no hay viento. En otras palabras, Waterseer siempre está acumulando agua.
En países como Mozambique, existen millones de personas sin acceso a agua limpia. La población, sobre todo las mujeres y los niños, tienen que caminar durante horas para encontrar agua insalubre. El agua en mal estado mata a más de medio centenar de niños mozambiqueños al día, por lo que la principal ventaja del Waterseer es que un sistema cómodo y económico para salvar vidas.
Además, para su funcionamiento no requiere mano de obra y las tareas de mantenimiento se reducen a la limpieza periódica de los filtros, una operación que cualquiera puede llevar a cabo sin problemas. La instalación de aparato es muy simple y su diseño está pensado para que las poblaciones más humildes puedan hacerlo sin ayuda de nadie, ya que solo es necesario cavar un agujero en la tierra.