En la actualidad, cada vez hay más personas que se preguntan qué es una casa autosuficiente, qué tipos hay y cómo tener una vivienda que sea cada vez más eficiente.
Las casas autosuficientes son tendencia desde hace unos años, debido a que la sociedad está cada vez más concienciada con un estilo de vida ecofriendly, el uso de energías renovables y de materiales reciclables y ecológicos.
Tener una casa autosuficiente es verdaderamente eficaz si se combina con un estilo de vida completamente orientado a reducir el impacto ambiental de nuestra vida en el planeta.
Suena muy hippie así de primeras, pero no tiene nada que ver con ser hippies o no, sino con ser responsables con todo lo que nos rodea.
Cuidar el gasto energético es uno de los mantras de un estilo de vida más sostenible y de las casas autosuficientes.
Si lo vemos en términos prácticos, compensa porque provoca un importante ahorro económico en la factura de la luz si lo ponemos en práctica de manera prolongada en el tiempo.
¿Quieres saber cómo hacer autosuficiente una casa, si puedes hacerte con una casa autosuficiente prefabricada o cómo tener un estilo de vida más autosuficiente? ¡Acompáñanos!
Cuando se habla de una casa autosuficiente se está haciendo referencia a una vivienda que:
Dicho de otro modo, es aquel inmueble que puede generar de forma renovable toda la energía que necesita.
Asimismo, estas viviendas son capaces de abastecerse mediante la recogida de aguas pluviales o con la extracción de agua de pozos cercanos.
Su diseño y arquitectura han de ser bioclimáticas o sostenibles, es decir, que han de tener en cuenta las condiciones climáticas y aprovechar los recursos naturales disponibles para reducir el impacto ambiental tanto de la construcción como de su posterior uso.
Por otro lado, es importante remarcar que no es indispensable que una casa autosuficiente sea al mismo tiempo bioclimática. Pero sí que este es un buen complemento, ya que reduce aún más la demanda energética del hogar.
Si te preguntas cómo construir una casa autosuficiente, debes tener en cuenta todos los agentes externos, como las horas de sol, los vientos, la pluviometría...
De esta manera se reducirá el consumo necesario y podrás obtener energía a través de la lluvia, el sol y el viento. Pero no es lo único en lo que debes enfocarte.
Veamos, a continuación, en qué se basan las casas autosuficientes según los expertos y las personas que ya las pueden disfrutar. ¡Presta atención!
Para poder mantener una buena temperatura en el interior de la vivienda es importante que las ventanas:
Gracias a la ventilación mecánica se renueva el aire del interior y se mantiene limpio.
Si te decantas por contar con un recuperador de calor, conseguirás mantener una temperatura de confort dentro de tu vivienda y evitarás que los gases contaminantes, el polvo y el polen accedan a tu hogar.
La cara principal de la vivienda en España preferiblemente debe estar orientada hacia el sur. De este modo se aprovecharán al máximo las horas de luz solar. Esto es especialmente recomendable en las viviendas con paneles solares.
En aquellas paredes que den al norte conviene evitar las ventanas, pues por ellas es más fácil que se produzca una pérdida de temperatura en las temporadas más frías.
Cuando se habla de autoconsumo energético lo más habitual es hacer referencia a las placas solares.
Gracias a ellas obtendrás agua caliente sanitaria, calefacción y toda la electricidad que necesites para surtir al sistema eléctrico de tu hogar.
Los aerogeneradores son una excelente opción para disfrutar de autoabastecimiento energético en tu hogar.
Los equipos como estos simulan el funcionamiento de un molino de viento a pequeña escala, por lo que pueden convertir la energía eólica en electricidad y calentar el agua sanitaria.
Estas son dos grandes opciones para apoyar la generación de energía para los equipamientos de calefacción y agua caliente, además del sistema de refrigeración en los meses más calurosos.
La geotermia aprovecha la energía que procede del interior de la tierra, mientras que la biomasa utiliza la materia orgánica como fuente de calor.
Gracias a las mejoras que han sufrido en los últimos años, esta es otra la manera ideal de almacenar energía eléctrica en una casa autosuficiente.
A pesar de su coste, se considera que en 7 años la inversión quedará amortizada mediante el ahorro en las facturas de energía.
El suministro hídrico es otro de los indispensables en cualquier vivienda. Desde épocas remotas se ha reutilizado el agua de lluvia y, en la actualidad, también sigue presentándose como una alternativa muy interesante.
Para ello, la vivienda debe tener un estanque o acumulador que recoja el agua; y, por supuesto, unos equipos de purificación para que esta pueda utilizarse como agua potable.
Una vez que sabes lo que necesita una casa de autosuficiente para ser considerada como tal, solo nos queda mostrarte los diferentes tipos de casas autosuficientes que puedes encontrar en función de sus materiales de fabricación. Debido a su gran variedad, seguro que encuentras la que mejor encaja contigo.
Este material es un buen aislante, colocado dentro de las paredes. Además favorece la transpiración, brinda sensación de calidez e impide la degradación de la vivienda.
Un material natural, que se recicla de manera muy sencilla y que aporta a los hogares gran calidez y capacidad aislante.
Los ladrillos más empleados en estas viviendas son los de adobe, los bloques de tapial y los BTC o ladrillos de tierra compactada. Dependiendo de los escogidos, las características cambiarán.
Es el material más económico de los que te mostramos, aunque también es el menos ecológico y sostenible. Aun así, podemos encontrar hormigones elaborados con materiales reciclados.
Sus estándares de calidad son más altos y, al fabricarse de modo estandarizado, tanto la generación de residuos como los tiempos de su proceso de construcción son menores.
Muchos de los estándares necesarios para que una casa sea considerada autosuficiente no siempre son accesibles para todas las viviendas.
Grandes núcleos urbanos alejados de la naturaleza, estilos de vida que demandan un consumo de recursos mayor que los que la propia casa es capaz de producir, legislaciones vigentes y otros muchos elementos podrían truncar la evolución de una vivienda tradicional hacia una casa autosuficiente.
Cuando quieres algo de verdad, porque es importante, no te rindes nunca. Y queremos cuidar el planeta de verdad, porque es importante, así que no vamos a rendirnos y estamos seguros de que tú tampoco.
Suponiendo que sea imposible transformar de lleno tu casa en una vivienda autosuficiente, todavía hay muchas pequeñas acciones que puedes tomar para contribuir con el medioambiente y ahorrar dinero.
Con la aprobación de la comunidad de propietarios se pueden poner placas solares en casa para producir energía de manera sostenible.
Una breve búsqueda en cualquier portal de venta de artículos tecnológicos te guiará a pequeños gestos que producen ventajas grandes, mediante gadgets que optimizan recursos:
Cambiar de compañía de luz es un paso rápido y puede marcar una gran difencia en el planeta y en tu factura de la luz.
Pásate de tu compañía de luz tradicional al servicio de energía de Yoigo, EnergyGO, que garantiza que toda la electricidad que llega a tu casa es 100% renovable y a precio razonable.
¿Te ha quedado más claro qué es una casa autosuficiente? Esperamos que sí. Y recuerda: si estás pensando en hacerte con una no dudes en visitar nuestra tarifa de autoconsumo solar.