En un tiempo en el que parece haber días mundiales para cualquier cosa, conviene recordar uno de los más importantes que existen, al menos en lo que respecta a nuestro compromiso para con el planeta en el que habitamos. Aunque hubo una época en la que parecía que el ser humano no se preocupaba mucho por el entorno en el que vivía, parece que al fin hemos empezado a verle las orejas al lobo. De unos años a esta parte hemos comenzado a desarrollar acciones para velar por la conservación del medioambiente, y el Día Mundial de Medio Ambiente es una de ellas.
Sí, al igual que solemos decir con San Valentín, este día debería celebrarse los 365 días del año (366 si, como este 2020, es bisiesto). Pero hasta que eso ocurra, que lo vemos complicado, tener un día, tan solo uno, en el que todo gire en torno a la importancia de cuidar el medioambiente es esencial para concienciar a la gente. Sobre todo a las generaciones que vienen detrás, que son las que tienen que hacerse fuertes a la hora de exigir un mundo, por lo menos, igual de bueno que el que los demás hemos estado disfrutando.
Uno de los temas más recurrentes de los temas más recurrentes de los últimos años, por mucho que le pese a Donald Trump, es el constante aumento de la temperatura de nuestro planeta. Lo que ha venido a llamarse ‘calentamiento global’, que suena un poquito menos grave que lo que casi todos estudiamos en su día: el temible efecto invernadero.
A pesar de que no fue declarado como tal por la Organización de las Naciones Unidas (la ONU) hasta alrededor de tres años y medio más tarde, el Día Mundial del Medio Ambiente se celebra desde el año 1974. Es decir, por mucho que ahora nos haya dado por salir a practicar plogging (cosa que está tremendamente bien), son varias ya las generaciones que llevan décadas manifestando su preocupación por nuestro planeta.
Muchos aún no se dan por enterados y hay que ir tirándoles de las orejas para que dejen a un lado otros temas y se centren en lo verdaderamente importante:
Eso sí, como ya os hemos dicho, deberíamos destinar un ratito de cada jornada a las actividades del Día Mundial del Medio Ambiente, ¡es la única forma de que consigamos salvarlo!
Ahora que sabemos qué día se celebra y desde cuándo se hace, toca hablar del porqué. La intención no es otra que sensibilizar a la población poniendo el tema tanto en la agenda setting política como en la de los medios de comunicación, y los principales objetivos que se persiguen son estos:
Si tenemos en cuenta que se trata de una celebración a nivel mundial, lo más normal es que las actividades que se desarrollen a lo largo del Día Mundial del Medio Ambiente sean muchas y muy variadas.
La importancia que adquiere a nivel global hizo que sus organizadores decidiesen dedicársela a algo especial cada año. Una especie de lema para el Día Mundial del Medio Ambiente que va cambiando para acentuar un problema en concreto y que este 2020 ha estado dedicado a la biodiversidad y se ha celebrado en Colombia.
Muchos han sido los rostros conocidos que han luchado abiertamente por el futuro de nuestro planeta. Unos aún siguen haciéndolo y otros ya no están entre nosotros, pero todos ellos tienen una característica en común además de compartir la preocupación por el medioambiente: nos han dejado algunas frases muy buenas para la posteridad:
Como ya hemos dicho antes, los niños deben ser unos de los máximos protagonistas del Día Mundial del Medio Ambiente. Sí, son los políticos y los dueños de las grandes multinacionales los que deben cambiar las cosas, pero es que un día ellos se convertirán en todo eso. Por eso es tan importante que se eduquen en la importancia de cuidar nuestro planeta desde pequeños, para que luego no haya que hacer de nuevo todo este trabajo de concienciación.
Además, con ellos resulta tan sencillo como hacer algo de esto: