El calorcito que nos dan los radiadores en invierno es un placer divino, por eso mismo no queremos que nada minimice su potencia. Muchos tenemos en casa una balda sobre el para apoyar cosas y ganar espacio, pero no todo el mundo conoce us desventajas.
La calefacción es fundamental en las temporadas de baja temperatura y uno de los elementos más comunes es el radiador. Si quieres aprovechar el espacio, una balda puede ser una buena opción.
El rendimiento de la calefacción, los riesgos y la utilidad son algunos de los factores que deberás tener en cuenta.
Una balda sobre radiador es una pieza de madera que se coloca encima de la calefacción para aprovechar mejor el espacio de la habitación. Si quieres instalar este elemento, te recomendamos que atiendas a sus pros y contras.
Hay varios motivos por los que incluir este elemento encima del radiador. Los más importantes son los siguientes:
Por contraparte, los inconvenientes de incorporar una balda sobre el radiador son:
Si quieres colocar este elemento hay algunos factores que debes tener en cuenta para que su uso sea lo más eficiente posible.
En primer lugar, tienes que gastar mucho cuidado con la distancia a la que colocas la balda. No es muy recomendable acercar un objeto de madera a una fuente de energía calorífica.
Cuanto mayor sea la distancia entre estante y radiador menor efecto tendrá en la eficiencia de la calefacción. En ningún caso pegues ambos elementos y procura guardar una distancia de mínimo cinco centímetros.
Por otro lado, también tienes que decidir cómo vas a colocar la balda. El método que utilices para anclarlo a la pared tiene que ser duradero y seguro, porque si cae el estante entraría en contacto con el radiador y puede provocar un incendio.
La amplitud y grosor de la balda también es importante. Si es fina, pero con poca anchura, podrás colocar menos elementos, pero afectará en menor medida a la calefacción.
Antes de instalar una balda ten en cuenta para qué vas a utilizarla y así podrás elegir la más adecuada. Si la quieres para disimular el radiador deberías escoger una que cubra el espacio del radiador pero que no tenga mucho grosor.
Si quieres modificar el estado de tu radiador o mejorar la estética de la habitación existen algunas otras formas que deberías tener en cuenta:
Si quieres evitar las quemaduras, instalar este elemento te puede ayudar a protegerte de las heridas. Es un mueble que rodea la calefacción y evita que puedas entrar en contacto con ella.
Normalmente suelen incorporar puertas para facilitar el acceso y facilitar la limpieza. También los puedes encontrar sin aperturas. Hay que destacar que reducen el rendimiento calórico y dificultan el mantenimiento.
Además, lo puedes utilizar para colocar cualquier objeto (no muy pesado) encima y almacenar utensilios.
Pintar los radiadores es uno de los métodos más empleados para mejorar su estética. Con unos colores más acordes a la habitación se consigue una mejor armonía y se tapan algunos desperfectos.
Uno de los mayores inconvenientes que tiene esta práctica es que en función del tipo de pintura puede reducir mucho la emisión de calor. Por eso, es recomendable comprar un producto de calidad.
Además, debes tener cuidado y no echar mucha cantidad de pintura y no manchar las paredes ni el suelo de la habitación.
El cuidado de los radiadores es fundamental para mantener una calefacción segura y eficiente. Colocar una balda encima puede ayudarte a mejorar la estética de la habitación y almacenar objetos.
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