¿Qué es y para qué sirve el metanol?

El metanol es una solución básica de alcohol. Se trata de un líquido que mientras permanezca a temperatura ambiente, es incoloro, muy ligero y tiene muy poca densidad, pero a la vez es tóxico e inflamable. Este hecho ha provocado que en muchas ocasiones su uso haya sido muy cuestionado. Hoy en día el metanol sirve para ser anticongelante, como combustible y como disolvente. También es conocido como alcohol de madera.

También es posible saber qué es el metanol a nivel químico. De hecho, tiene su propia fórmula de naturaleza química molecular que es CH40 y una fórmula más avanzada que es CH3OH.

¿Cuáles son los diferentes usos del metanol?

El metanol ha tenido diferentes usos a lo largo de la historia. Se utiliza desde la Edad Antigua, concretamente en el Antiguo Egipto. Esta civilización usaba el metanol en los procesos para embalsamar a los faraones.

Posteriormente, en el año 1661 el químico Robert Boyle obtendría este componente mediante la destilación de la madera y desde ese momento comenzaría a utilizarse para los fines actuales.

Hoy en día se han descubierto nuevos usos para el metanol. Algunos de los más destacados son como combustible, como resina natural o como colorante. Además, también se utiliza para fabricar plásticos o disolventes.

Otro sector en el que el metanol ha alcanzado un gran protagonismo es el automovilístico, ya que es uno de los componentes que se emplean en la creación de carburantes y anticongelantes.

Otro aspecto por el que el metanol ha pasado a estar muy valorado y que ha contribuido a que su uso se haya extendido es que tiene un coste muy bajo y por lo tanto se convirtió en una alternativa muy interesante.

El momento de mayor auge del metanol fue la crisis del petróleo de 1970, una etapa en la que se convirtió en un componente necesario y barato.