Cuando hablamos de bobina lo hacemos de uno de los elementos pasivos en un circuito eléctrico que tiene un almacenamiento energético mediante la inducción. Es por esto último que a la bobina también se le conoce como inductor.

La bobina suele ser un componente cilíndrico, que está compuesto de un alambre o hilo de cobre en forma de muelle con conexión en sus dos extremidades, por donde pasa la electricidad.

Este componente pasivo puede formar parte de diferentes tipos de circuitos eléctricos, como el timbre de una casa, por ejemplo. El origen de su término se encuentra a mediados del siglo XIX, cuando el científico Nijola Tesla desarrolló una bobina que posteriormente se popularizó con el nombre de bobina de Tesla.

¿Cuáles son los tipos de bobinas?

¿Sabías que existen diferentes tipos de bobinas? Cada tipo tiene sus propias características y aplicaciones específicas. Aquí te presentamos los más comunes:

  1. Bobinas de Aire: Como su nombre indica, estas bobinas no tienen un núcleo de material ferromagnético. Son básicamente espiras de alambre enrolladas en un formato cilíndrico o toroidal, y se utilizan principalmente en frecuencias altas.
  2. Bobinas con Núcleo de Hierro: Estas bobinas tienen un núcleo hecho de hierro o algún material ferromagnético. Esto aumenta su inductancia y eficiencia, y se utilizan comúnmente en transformadores y en aplicaciones de baja frecuencia.
  3. Bobinas con Núcleo de Ferrita: Similar a las bobinas con núcleo de hierro pero con un núcleo de ferrita, que reduce las pérdidas en altas frecuencias. Son muy utilizadas en la electrónica moderna, especialmente en dispositivos de comunicaciones.

Conocer los diferentes tipos de bobinas y sus aplicaciones es esencial para ingenieros y aficionados a la electrónica, ya que cada tipo tiene propiedades únicas que lo hacen adecuado para ciertas aplicaciones.

¿Qué aparatos tienen bobinas?

Las bobinas son más comunes de lo que podríamos pensar y se encuentran en una amplia gama de dispositivos. Algunos de los aparatos más comunes que contienen bobinas incluyen:

  • Transformadores: Un uso clásico de las bobinas, donde se utilizan para cambiar los niveles de voltaje en circuitos eléctricos.
  • Equipos de Audio: Las bobinas se usan en altavoces y micrófonos para convertir señales eléctricas en sonido y viceversa.
  • Motores Eléctricos: En motores de diversos tipos, las bobinas se emplean para crear campos magnéticos que impulsan el movimiento.
  • Televisores y Radios: Las bobinas en estos dispositivos se utilizan para sintonizar señales y en la gestión de la frecuencia.

Este es solo un vistazo a cómo las bobinas desempeñan roles fundamentales en la tecnología moderna. Su importancia en la electrónica y la electricidad es indiscutible, y continuarán siendo esenciales en el desarrollo de nuevas tecnologías.

¿Cuál es la función de la bobina?

Pero, ¿cuál es la finalidad de la bobina? Este elemento pasivo en un circuito eléctrico tiene una gran capacidad para favorecer el flujo de la corriente eléctrica. También se utiliza para controlar las fluctuaciones eléctricas y evitar un cambio de intensidad en la corriente. Así, su uso es muy importante para evitar daños en cualquier dispositivo.

Se trata de un elemento muy versátil dentro de la electricidad. Y, por esta razón, su uso está muy extendido. De este modo, se trata de un componente muy común en aparatos tecnológicos, como la televisión, la radio, etc. y en los motores eléctricos de los coches.

Partes de una bobina

La bobina tiene varias partes diferencias, pese a ser un elemento pequeño dentro del entramado eléctrico. Las más importantes son las siguientes:

  • Devanado inductor: las espirales que permiten pasar el flujo de la electricidad.
  • Culata: extremidad que se encarga de enlazar la bobina con otros materiales.
  • Pieza polar: sirve para unir la culata con otra parte del circuito.
  • Núcleo: lo que rodea al devanado inductor.
  • Expansión polar: es la que rodea al entrehierro situado junto a la culata.
  • Polo auxiliar: tiene la función de mejorar la corriente en el circuito.