Es posible que hayamos escuchado hablar en alguna ocasión del concepto de carga total de contaminación. El propio nombre de este hecho hace que comencemos a dibujar su significado en nuestro cerebro, pero… ¿es realmente el acertado? Hoy definiremos no solo qué es la carga total contaminante, sino a qué afecta e incluso cómo se calcula.
Según el diccionario de la Academia Española de la Lengua, la carga contaminante es la “cantidad de contaminantes concentrados en un recurso natural, en particular, el agua y la atmósfera”. Así pues, al hablar de la carga total de contaminación, nos referimos a la masa de un contaminante específico que ha sido vertida en un ambiente determinado y en un periodo de tiempo determinado. Dicho en cristiano: la carga total de contaminación es la cantidad de contaminantes que la acción humana ha vertido en una zona determinada, durante un periodo de tiempo que hay que definir antes de comenzar con los cálculos.
Factores como la actividad humana y la industrial han provocado que hoy en día haya una gran carga de contaminación. Además, se han asignado hasta ocho tipos de contaminación. La mayoría de ellos son generados por una serie de causas demográficas y por la utilización de agentes tóxicos. Estos son los contaminantes más influyentes.
Para empezar, es importante saber que a la hora de calcular la carga total de contaminación, hay que separar los vertidos urbanos de los industriales. Una vez hecho esto, el análisis de los vertidos urbanos se lleva a cabo a partir del cálculo de unidades contaminantes. Estas suelen medirse en toneladas por año, y es el dato que debe compararse para determinar si está o no dentro de la normalidad.
Respecto a los contaminantes industriales, la carga de dichos efluentes también se mide en unidades contaminantes, y es a partir de la que se deben determinar las acciones a tomar contra las empresas culpables de dichos vertidos. También se miden en toneladas/año, y cada Estado es el responsable de marcar sus límites en este aspecto. Por desgracia, lo normal es que tanto las cargas totales de contaminación urbana e industrial estén por encima de lo permitido (y saludable).
En estos momentos hay más de 190 países en el mundo, todos ellos generan ciertos niveles de contaminación, pero no todos perjudican del mismo modo. En el mundo desarrollado es donde se produce el mayor porcentaje de contaminación. China y Estados Unidos aportan la mayoría de ese porcentaje, después se sitúa la Unión Europea con sus 27 estados, seguidos de la India. En el caso de España, tan solo genera el 1% de la contaminación mundial.