La conocida como Comisión Nacional de Energía de España, o por sus siglas CNE, era un ente que actuaba de manera independiente hasta 2013, año en el que pasó a integrar la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Se trataba de una entidad que regulaba los mercados energéticos y ahora esta función se integra junto a la de otros sectores (Telecomunicaciones, Transportes…).

La Comisión Nacional de Energía actuaba de manera independiente, pero estaba sometida a control parlamentario por el Gobierno y los diferentes grupos presentes en el Congreso de los Diputados. Además, sus presidentes y vicepresidentes eran elegidos y nombrados a través del Ministerio de Industria.

¿Cuál es la función de la CNE?

La función de la Comisión Nacional de Energía en España es la de comprobar y supervisar el funcionamiento de los sistemas energéticos (gas natural, petróleo, carbón....). Este ente público debe velar porque en estos mercados se cumpla con la legalidad y haya una transparencia de su funcionamiento de manera real.

También tiene el objetivo de mantener una línea equilibrada en el sector energético, aconsejado a las empresas con posibles mejoras o correcciones que se podrían hacer. De esta manera, se podría decir que tiene un finalidad de tutela de todos los movimientos en el ámbito de la energía, sea cual sea su naturaleza.

Así, la CNE podría denunciar cualquier irregularidad presente en alguna de las empresas que integran el sistema energético español. Estas tareas no han desaparecido pese a integrar la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que ha pasado a ejercer todas estas funciones junto a otras.

Cabe recordar que, además de la CNE, la CNMC está integrada por otros cinco organismos supervisores: Comisión Nacional de la Competencia (CNC), Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT), Comisión Nacional del Sector Postal (CNSP), Consejo Estatal de Medios Audiovisuales (CEMA) y Comité de Regulación Ferroviaria y Aeroportuaria (CRFA).