El sector energético de un país es el nombre que reciben todas las actividades económicas que se producen en el interior de ese estado y que están relacionadas con los productos energéticos y con la producción, compra y venta de energía. Algunos de esos productos más destacados son el carbón, el petróleo o el gas natural.
Este sector es uno de los más importantes para la economía de cualquier país. El motivo es que para que se lleve a cabo cualquier actividad comercial que repercuta en las finanzas de trabajadores, empresas y estados es necesario que se produzca energía. Otro aspecto que hay que tener en cuenta es que muchos estados no disponen de fuentes naturales que produzcan la energía que necesitan y como consecuencia, tienen que recurrir a las importaciones.
El sector energético tiene una naturaleza económica porque de él surgen actividades como la producción, el transporte, la distribución y la comercialización de la energía eléctrica. Además, comprende a cualquier actividad que se relacione con la energía eléctrica así como a actividades del sector primario, del secundario y del terciario. También es un sector fundamental para todos los países porque influye en aspectos como la formación de precios.
Todas las actividades que se desarrollan en torno al sector energético están relacionadas con la aparición de productos compuestos por la energía de un país. A partir de aquí, surgen cuatro actividades principales, una de ellas es la generación de esa energía, otra el transporte de la misma, también está presente su distribución y finalmente, destaca su comercialización.
Para que el sector energético aporte un rendimiento económico son necesarias esas grandes actividades. En lo que respecta al transporte, intervienen las redes de suministro para que esa energía llegue a los consumidores y a los empresarios. En el caso de España y de la energía eléctrica, el país cuenta con una red de distribución primaria y con otra secundaria.
La actividad de distribución se lleva a cabo con el objetivo de que la energía sea trasladada desde la red de transporte hasta los puntos de consumo de los usuarios. Aunque también puede darse el caso de que esa energía vaya a otras redes de distribución de mayor calidad.
En el último lugar de la cadena se encuentra la actividad de la comercialización, que es realizada por las comercializadoras que tienen acceso a las redes de transporte y de distribución. Su objetivo es generar un beneficio con la venta de esa misma energía.
El sector energético en España destaca por la cantidad de electricidad que es generada por las fuentes de energía renovables y que además, supera el 50% de la producción total de esta energía. Destacando el papel de la energía eólica. Por detrás quedan otras como la energía solar fotovoltaica y la hidráulica. Todo esto genera beneficios económicos al país.
Otro sistema de funcionamiento del sector energético en España tiene que ver con la compra de energía eléctrica a los productores por parte de las comercializadoras, o con la firma de contratos comerciales con los agentes que las producen. Una vez que se realiza esta compra, esa energía es vendida a los consumidores por un precio que ha sido previamente acordado.
La emisión de CO2 es una de las causas principales de la contaminación y aproximadamente el 40% de las emisiones de este gas proceden de las actividades del sector energético. Acciones como la producción de gas natural, de combustibles o de electricidad pueden ser contaminantes.
Desde hace años se estima que todas las actividades relacionadas con la electricidad provocan más de un 20% de las emisiones de CO2, seguida muy de cerca por la actividad industrial. Por otro lado, la producción agrícola está detrás de un 10% de las emisiones. También es importante la presencia de los gases de efecto invernadero que causan más de un 10% de la generación de CO2.
A pesar de que los datos de los niveles de contaminación que generan las actividades industriales son negativos, la apuesta por las energías renovables ha mejorado estas cifras. La energía solar, la eólica o la hidroeléctrica se distinguen de las energías no renovables en que se regeneran de forma natural y eso reduce el daño que pueda sufrir el planeta a causa de la actividad industrial.
