La calefacción de casa es uno de esos gastos grandes que hay que afrontar mes a mes. A la hora de elegir un sistema, lo suyo es que te quedes con uno que no sea perjudicial para el medioambiente. Entre la chimenea bioetanol o la chimenea eléctrica: ¿cuál es más sostenible?
Todo el mundo está remando en la misma dirección hacia un planeta mucho más sostenible y la descarbonización de nuestra sociedad. Cada uno de nosotros puede aportar su granito de arena desde casa, con pequeñas decisiones del día a día.
El tipo de chimenea que te compres es una de esas decisiones. Optar por la opción menos contaminante ayuda a que se reduzca el número de emisiones perjudiciales que llegan a la atmósfera.
Uno de los elementos que más contamina de casa es el sistema de calefacción doméstico. Para conseguir ese calor tan buscado, es necesario que se queme un combustible, lo que deriva en la producción de gases perjudiciales.
Por supuesto, hay opciones que son más contaminantes que otras. Entre las más sostenibles nos encontramos con la chimenea de bioetanol y la eléctrica. Ambas, mucho más beneficiosas que su homónimo tradicional.
También conocida como estufa de bioetanol, este tipo de electrodoméstico es uno de los más sostenibles que te puedes encontrar para climatizar la casa. Todo, gracias al combustible que usa.
El bioetanol es un tipo de alcohol etílico que se consigue a partir de plantas ricas en azúcar, como la remolacha o la caña de azúcar. Al mezclarlo con las naftas, se puede usar como combustible.
Lo bueno de este combustible es que no se genera humo ni ningún residuo durante la combustión. El funcionamiento es muy interesante. Lo primero de todo es rellenar la chimenea con el material cuando está apagada.
Luego, se enciende y el fuego empieza a calentar el aire que lo rodea, de modo que asciende por la habitación. Como la llama trabaja directamente con el ambiente, no aparece humo y casi ningún gas.
Si juntamos esto con que hay una gran variedad de modelos, el resultado es una chimenea que no genera residuos y que puede decorar tu casa como quieras.
El único inconveniente que se le puede sacar a esta estufa es su coste. Las chimeneas de bioetanol son más caras que las normales, ya que este recurso tiene un precio más elevado.
Seguimos con otra de las alternativas en calefacción más sostenible que hay para la casa. Las chimeneas eléctricas no utilizan combustibles para su funcionamiento, aprovechan la electricidad.
Esto las convierte en una alternativa mucho más limpia, ya que no emite ningún tipo de residuo. Además, aprovecha la energía mucho mejor que otros sistemas, ya que convierte la electricidad consumida en calor.
¿Consume mucho este tipo de chimenea? En realidad, no. Los sistemas de este estilo necesitan más o menos la misma energía que un radiador eléctrico de las mismas características.
Otro de los puntos positivos que tienen las chimeneas eléctricas, es que se pueden instalar en cualquier tipo de vivienda, ya que no necesitan de un extractor de humos.
Partamos de la base de que ambas chimeneas son más que recomendables y sostenibles. Cualquiera de ellas reducirá tus emisiones perjudiciales, así que es recomendable que te pases a estos modelos.
Dicho esto, la chimenea eléctrica es la menos contaminante de las dos que hemos presentado. La de bioetanol apenas generan residuos, tan solo el CO2 equivalente a un par de velas, pero ya es algo mayor a cero.
Cambiar tu chimenea tradicional por una eléctrica o de bioetanol puede ser un primer paso para mejorar tu sostenibilidad y ayudar a cuidar al medioambiente desde casa.
En definitiva, estas son las principales diferencias entre la chimenea eléctrica y la chimenea de bioetanol que debes tener en cuenta:
CHIMENEA ELÉCTRICA | CHIMENEA DE BIOETANOL |
---|---|
No utiliza combustibles | Combustible sin residuos |
Aprovecha la electricidad | Sin humo ni gases de CO2 |
No genera residuos | Fácil instalación y mantenimiento |
Menos contaminante | Coste más elevado |
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