La electricidad es un elemento fundamental en el hogar. Sin embargo, no siempre tienes que recurrir a ella para iluminar tu casa. De hecho, cuando no existía, había que aprovechar la luz natural durante el día y se utilizaban otros mecanismos para la iluminación.
A simple vista, no parece tan fácil. Sobre todo en invierno, cuando las horas de luz son muchas menos que en primavera o en verano. Además, dependiendo de cada estancia, la iluminación deberá ser más o menos intensa.
Aunque creas que las bombillas son la solución más efectiva, no siempre es así. Con estos trucos tan simples y baratos, vas a ahorrar energía eléctrica. No sólo eso, sino que conseguirás una iluminación más potente.
Las velas son fáciles de encontrar en cualquier comercio. Encontrarás multitud de modelos, destacando las aromáticas y las ecológicas. Las primeras, tienen una función terapéutica. No son sólo un elemento decorativo más de tu casa. Su olor te relajará y hará que el ambiente sea más agradable.
Por otro lado, si quieres cuidar el medioambiente, las ecológicas son una buena opción. A diferencia de las convencionales, estas velas te pueden durar el doble de tiempo. Otro de sus beneficios es que se funden a menor temperatura y te ayudarán a prevenir quemaduras.
Se trata de una ventana con una abertura en el techo o en la parte superior de una pared. Los tragaluces tienen numerosas ventajas. Harán que algunas estancias de tu casa parezcan más grandes y aportarán un extra de iluminación.
Hay distintos modelos y algunos tienen ventilación incorporada. Tu hogar ganará una gran cantidad de luz. Especialmente en las horas de sol, verás reducido al máximo el uso de la electricidad.
Aunque sea una inversión, te compensará. Las láminas translúcidas están fabricadas con fibra de vidrio y ofrecen hasta un 95% de luz natural. Además, resisten las altas temperaturas y son un buen aislante acústico.
También están las ventanas solares o fotovoltaicas, cuya función es similar. Con las láminas, tu casa ganará mucha luminosidad. Además, te protegerán de la radiación ultravioleta. Merecen la pena por su gran durabilidad y resistencia. Pueden durar más de 20 años.
Más allá de ser un elemento estético, el espejo tiene una función muy importante en el hogar: la iluminación. Los espejos tienen un poder reflectante, ya que reflejan la luz natural por toda tu casa; incluso en las zonas más oscuras.
En cualquier espacio donde haya un espejo, notarás más luz. Prueba a instalar varios en los pasillos o en habitaciones donde la luz natural no sea suficiente. Sobre todo, son recomendables para las estancias más pequeñas. Tendrás la sensación de que el lugar es más grande.
Prueba a instalar puertas de cristal. A diferencia de las puertas de madera, las translúcidas permiten que pase la luz. Mientras que los materiales opacos no dejan pasar los rayos de sol, los transparentes sí.
Poner una puerta acristalada en casa es todo ventajas. Actúan igual que las ventanas y te ayudarán a aprovechar aun más la luz natural. Aunque no sean tan recomendables en estancias donde necesites privacidad, sí puedes optar por instalarlas en zonas como el salón o la cocina.
A ser posible, que sean blancas. Si te decantas por otros colores, evita los tonos oscuros o negros. Las cortinas también son un elemento fundamental en casa. Elegir las mejores facilitará la entrada de luz durante el día.
También, fíjate de qué material son. Cuanto más finas y transparentes sean, mejor. En ese sentido, las telas opacas no son nada recomendables si lo que quieres es ahorrar electricidad. Las persianas laminadas son otra buena opción. También te ayudarán a regular el paso de la luz.
A diferencia de las lámparas convencionales, utilizan la energía solar para producir luz. Te ayudarán a ahorrar dinero en tus próximas facturas. Además de tener una función decorativa, también son sostenibles. Uno de los lugares más recomendables para instalarlas es el jardín.
Coloca los muebles de tu casa de forma estratégica. Evita que el mobiliario de mayor tamaño se sitúe junto a las ventanas. La luz debe pasar por los ventanales sin ningún impedimento. Tampoco coloques objetos que obstaculicen la entrada de luz.
El blanco es uno de los colores estrella para el hogar. De hecho, no es casualidad que muchos diseñadores de interiores recomienden este color. El blanco no sólo aporta una mayor armonía a tu vivienda, sino que da más iluminación y profundidad.
Aumentarás la entrada de luz natural en casa. Lo mismo ocurre con los marcos de las ventanas. Mejor que sean siempre blancos. Potenciarán el reflejo de la luz. Si crees que tu vivienda es demasiado oscura, estos trucos te ayudarán.
El techo no tiene por qué ser del mismo color que las paredes. Sin embargo, te aconsejamos que sea blanco. Esto hará que la luz rebote con más facilidad, reflejándose en todos los rincones de tu habitación.
Si no quieres blanco, elige tonos claros y que no sean mate, ya que impide el reflejo de la luz. Como consejo adicional, debes saber que los techos blancos ayudan a reducir las altas temperaturas en verano.
El color, la decoración o la colocación de algunos elementos son la clave para ganar mucha iluminación en casa. Además, sin necesidad de derrochar electricidad. En EnergyGO te damos los mejores consejos para ahorrar energía. Si quieres saber más, visita nuestra web o llama al 900 622 700 y deja que te informemos.
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