Son más eficientes, no contaminan, apenas hacen ruido y tienen ventajas de accesos a las ciudades y frente a tributos. Sí, el coche eléctrico es el futuro de la movilidad, pero no es infalible en todos los frentes del coche de combustión. ¿A qué nos referimos?
Pues a que su batería enfrenta desgastes diferentes que el motor de gasolina o diésel; en invierno por el frío extremo, y en verano por el calor sofocante. ¿Cómo asegurar la autonomía en este último escenario? ¿Y qué se puede hacer para protegerla?
De todo eso te queremos hablar en este artículo. Así que, toma nota y descubre cómo proteger la batería del coche eléctrico del calor.
No, no basta con guardar el coche eléctrico en el garaje. No, porque durante el resto del tiempo seguirá sufriendo los efectos del calor veraniego. Y en esta situación dejarlo aparcado en la calle puede ser un lastre a la hora de moverse.
¿Qué consejos te damos para mantener la batería? Es muy sencillo y no requiere de grandes presupuestos.
La kriptonita de las baterías eléctricas son sin duda las temperaturas extremas. No importa si son bajas o muy altas, todas afectan por igual.
Las baterías de los coches , cuando pasan de los 45º C verán como sus componentes electrónicos se desgastan el doble de rápido. Esto tiene un efecto directo: el rendimiento de la carga cae de forma notable.
Si se llega a casos extremos, la carga de la batería del coche eléctrico puede llegar a detenerse por seguridad hasta que se enfríe. Ojo, las altas temperaturas y el sol del verano no solo afectan a la batería, sino también a las estaciones de carga que están en expuestas en el exterior.
Los sistemas inteligentes de carga reducen la intensidad y velocidad si hay peligro de sobrecalentamiento. Además, esto provoca que los tiempos aumentes y empecemos a tener problemas para recuperar la autonomía necesaria para finalizar un viaje.
Aquí te vamos a contar cuáles son los principales métodos para que la batería de tu coche evite altas temperaturas en verano. Apúntalos todos para cuidar bien de ella y que te acompañe durante muchos años y kilómetros.
Estas están hechas de iones de litio no se suelen adaptar bien a las temperaturas extremas, por lo que su nivel ideal suele estar en torno a los 20 grados. Por lo que es muy importante que durante el verano y las altas temperaturas estés un poco más pendiente.
Cuanto más alta está la temperatura del coche, también lo será la incidencia en la autonomía. Pero ojo, que el abuso de aire acondicionado también afectará de forma directa en ella. Sí, la bomba de calor es lo mejor para climatizar tu coche, pero también es un sistema que necesita mucha energía.
El riesgo del sobrecalentamiento de la batería aumenta durante los viajes más largos y veraniegos. Esto puede causar daño con el tiempo y acabar apareciendo fisuras e incluso grietas en sus componentes cuando se cargan a temperaturas altas. No decimos que no lo uses, pero si con responsabilidad.
Por el bien de tu batería y de tu bolsillo, conduce siempre de forma suave y eficiente sin pegar acelerones o frenazos bruscos (siempre que se pueda evitar claro). En zonas como las autopistas o autovías, lo mejor que puedes hacer es mantener la velocidad constante y quitar la frenada regenerativa.
Este sistema es muy útil en ciudad para ayudarte a recuperar algo de energía cuando sueltas el acelerador. En cambio, en largas distancias no viene nada bien porque tendrás que pisar continuamente el pedal para mantener el ritmo.
De nada te sirve ir a una velocidad alta si la batería de tu vehículo se agota y te deja tirado antes de llegar al final. A medida que reduzcas los km/h a los que vas, verás como la autonomía aumenta. Si encima hay 37 grados en el exterior, ir a máxima potencia la reducirá aún más.
Aunque parezca que no, el sol pega y fuerte en verano. Por eso mismo te recomendamos que cuando aparques el coche sea en un lugar con sombra o en el que habrá sombra pronto.
De esta forma, la batería estará a una temperatura más adecuada y el aire acondicionado tampoco necesitará tanta energía.
Además, ten en cuenta que la temperatura ambiente no es la misma que la que alcanza el interior de un vehículo negro durante seis horas al sol. Considera también que el sistema de refrigeración inteligente que incorporan muchos modelos no funciona cuando está parado el coche.
Cada vez que vayas a realizar un viaje largo, es mejor que antes de la salida climatices el espacio interior y refrigeres la batería. Si tienes el coche enchufado al punto de carga, el vehículo obtendrá la energía directa sin tener que consumirla de la batería.
Siempre que sea posible, carga la batería de tu coche eléctrico por la noche para ayudar al sistema a mantener una temperatura agradable y fresca. Durante el proceso de carga la batería aumenta su temperatura, y si fuera hay un calor de 35 grados, pues no ayuda.
Durante el día, la mejor opción son los aparcamientos subterráneos, con vegetación o techados que tienen puntos de carga y mantienen tu coche a la sombra.
Con todos estos trucos mantendrás tu batería en el mejor de los casos, lo que significa más autonomía y mas ahorro. Y créenos, en EnergyGO sabemos mucho y por eso te recomendamos que eches un vistazo a las tarifas que ofrecemos en nuestra web o llamando al 900 733 905.