Las diferencias entre los coches eléctricos o híbridos y los de combustión tradicional se van estrechando.El precio de compra de un coche eléctrico camina hacia el del de combustión (o viceversa). Pero si hablamos de coste operativo, el coche eléctrico es más competitivo.
Es decir, que puede rivalizar e incluso batir alguna de las características de los coches con motor convencional. Por ejemplo, el mantenimiento es mucho más simple, pero a la vez necesario.
¿Estás pensando en viajar? En vacaciones de verano el EV sigue ofreciendo una garantía de sostenibilidad. La cosa es que implica unos retos añadidos a los medios de transporte tradicionales.
Sí, nos referimos a estudiar la red de puntos de recarga en la ruta, pero también a insistir en el mencionado mantenimiento de una forma especial. El mecánico sabrá qué hacer, pero tu también deberías tener una idea general.
Estamos en la época estival y todos queremos irnos a ese lugar de vacaciones que llevamos pensando desde hace ya un año. Si vas a viajar en coche eléctrico, la mejor recomendación es que compruebes el estado de tu vehículo antes de comenzar la ruta.
Es cierto que mantener el coche eléctrico en buen estado es más fácil, pero no por eso tienes que olvidarte de hacer las revisiones pertinentes. Esto es sencillo porque tienen un número inferior de piezas, por tanto, menos partes que se puedan estropear.
Haciendo las revisiones periódicas ayudaremos al vehículo a ganar en vida útil porque detectaremos un problema antes de que sea demasiado tarde.
De manera preventiva, antes de un viaje largo como pueden ser las vacaciones de verano, aunque el coche eléctrico tenga un mantenimiento bajo, siempre debes llevarlo a un taller por si acaso.
Aquí te contaremos cómo es el mantenimiento de un coche eléctrico, una de las ventajas de este tipo de vehículos.
Como hemos mencionado antes, los motores de combustión se componen de miles de piezas que se mueven de forma sincronizada. Por tanto, están acostumbradas a los cambios extremos de temperatura y los altos niveles de fricción.
Para que no se deteriore el motor térmico es necesario que lo cuides con los mantenimientos periódicos. En muchos casos no serán más que una revisión y por tanto no supondrán un gran gasto. Como mucho tendrás que cambiar el aceite o los filtros.
Esta acción es básica para que los líquidos que ayudan al correcto funcionamiento del vehículo puedan seguir trabajando sin perder sus propiedades. Esto no quiere decir que algunas piezas no acaben desgastándose y se tengan que cambiar, pero será cada más tiempo.
Hacemos referencia a la correa de distribución, embrague o las bujías entre otros. En el coche de combustión hay que gastar dinero sí o sí claro.
Por lo demás (motor, electrónica y cargador) no hay que preocuparse, porque como cuentan con pocos elementos de desgaste, será más lento y menos agresivo. De esta manera, se reducen las temperaturas y vibraciones y, por tanto, también el mantenimiento.
La batería, al contrario de lo que muchos piensan, no necesita mantenimiento. Es similar a la de un móvil en grande, simplemente se degradan y reducen su vida útil hagas lo que hagas. Por lo que te aconsejamos seguir buenas prácticas para retrasar su cambio.
Al margen del sistema de propulsión que integran estos coches eléctricos, hay puntos que como en los motores de combustión requieren mantenimiento. Por tanto, siempre que te vayas de vacaciones (independientemente del tipo de motor) tienes que hacer una revisión.
Los tiempos exactos del mantenimiento de los vehículos eléctricos están programados por los fabricantes en el manual del automóvil. Además, aparecen bien especificados los elementos como escobillas del limpiaparabrisas, neumáticos, batería o las suspensiones.
La excepción que los diferencia sobre manera de los motores de combustión son los frenos. En el caso de los eléctricos tienen una frenada regenerativa que hace un uso menos intensivo de los discos y alarga su vida útil.
Un aspecto a tener muy en cuenta antes de viajar es revisar el aislamiento de las conexiones eléctricas, poniendo especial atención en las que afectan a la parte de alto voltaje. Entre ellas están las que entran y salen de la batería de tracción.
Para ello, se necesita un equipo específico y un técnico que sea especializado en coches eléctricos (no vale cualquier taller). Por el resto, la revisión de neumáticos, amortiguadores, pastillas y luces es igual en todos los vehículos.
En el momento que hablamos de coches eléctricos, el concepto de optimización está más que claro. Eficiencia, optimización y ahorro son tres adjetivos que definen perfectamente a los vehículos con este tipo de motores.
Aun así, aquí te vamos a dar diferentes consejos para que puedas sacarle el máximo rendimiento a estos vehículos a la hora de mantener su frenada, batería, consumo... De esta forma alargarás su vida útil y tendrás que acudir menos al taller.
La mayoría de los coches nuevos tienen diferentes modos de conducción que permiten adaptarse a las necesidades de los diferentes trayectos. Activar el modo ECO, especialmente en rutas de ciudad, permite ahorrar y acumular hasta un 15% de energía.
Esto se da porque el sistema adapta automáticamente la respuesta del vehículo al acelerador y potencia del motor. Por tanto, puede que el coche no tenga la misma velocidad de arranque, pero será insignificante y te permitirá tener mayor autonomía.
Una de las funciones más innovadoras (si cabe) de estos vehículos es la frenada regenerativa. El inversor que estos coches tienen instalado regenera la energía que se produce al levantar el pie del acelerador cuando el vehículo reduce su velocidad.
La electricidad que se genera a raíz del roce de las piezas se envía a la batería del coche. Esta herramienta hace que cuando sueltes el pedal del acelerador el coche se "frene" más rápido de lo habitual, pero así mejoras la vida útil de las pastillas y discos de freno.
Hay muchas formas de ahorrar con el aire acondicionado o climatizador del coche. Te parecerá una tontería, pero realmente afecta al consumo energético del vehículo. Además, cuanto más lo uses, más tienes que revisar el estado de los filtros de aire.
Es mejor que tengas un uso constante a una temperatura más alta para que sea estable a que lo enciendas de forma violenta a 17 grados. No te olvides que, en los coches eléctricos, el aire acondicionado funciona con la energía de la batería.
Ten muy en cuenta que con esta clase de vehículos no se recargan las baterías al completo. Además, tampoco es recomendable que dejes el coche conectado a la luz cuando haya terminado el proceso de carga.
Es mejor utilizar un cargador adaptativo y establecer una potencia de carga que se ajuste al tiempo que vamos a estar sin utilizar el coche. Un ejemplo sería una velocidad de carga baja durante toda la noche para que cuando nos levantemos llegue al 100%.
De la misma forma que en los demás dispositivos electrónicos, no es conveniente utilizar muy de seguido las recargas rápidas porque pueden causar daños en las celdas de la batería.
Ahora ya dispones de toda la información sobre lo que necesitas saber sobre el mantenimiento del vehículo eléctrico antes de irnos de vacaciones.
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