Tomar decisiones es algo difícil en la vida, y si encima sus consecuencias son pagar más de la cuenta durante meses y meses, la cosa se complica aún más. Si es la primera vez que contratas una tarifa de luz en tu casa, mucho cuidado porque después no hay tiempo de arrepentirse.
Es lógico que cuando te mudes, compres una casa o adquieras un negocio no tengas mucha idea de lo que es más importante a la hora de contratar una tarifa de luz, por eso mismo aquí te haremos la mejor guía. Saca las notas de tu móvil y apunta 😉
Como siempre te recordamos, estos consejos son aplicables de forma general a todos los espacios, pero en muchos casos hay excepciones.
La potencia es el punto inicial de partida y la que determina lo más importante de un contrato: el mínimo que pagaras sí o sí cada mes. Esta potencia mide la cantidad de kilovatios (kW) que tu casa necesitará en el momento de máxima demanda, con todo encendido vaya.
Lo mejor que puedes hacer es, en el momento que quieras del día, encender todas las luces, poner la lavadora, encender la vitrocerámica, el microondas, la plancha y el horno. Si cuando haces eso saltan los plomos, entonces significa que tienes menos potencia de la que necesitas.
Contacta con tu suministrador y coméntale la situación para que suban la potencia máxima contratada, pero tampoco te pases porque esa subida de potencia también es de precio.
La forma de facturar la energía tiene dos variables en tu factura, el consumo y la potencia (que es el fijo) por eso mismo debes tener cuidado. Para poder tener varios electrodomésticos al mismo tiempo y no arruinarte hazte con los que tengan la mejor etiqueta de eficiencia energética.
No solo hace falta saber cuánto vas a consumir, otro factor muy relevante es saber cómo vas a consumir la energía. Está claro que eso dependerá de tu estilo de vida, pero afecta mucho a lo que pagas a final de mes, así que es importante conocerlo.
Te recomendamos que pienses en cuánto tiempo estás en casa, si tienes teletrabajo, si estudias en la biblioteca o si eres una persona que se pasa horas disfrutando de jugar al PC.
Si consumes electricidad de forma homogénea (o sea todo el día lo mismo más o menos) te rentará más tener un contrato que sea del estilo “tarifa plana” y de no ser así, mirar otro que se adapte mejor a tus hábitos. También ten en cuenta a largo plazo si tus hábitos serán los mismos.
En el mercado existen tantas tipos de tarifas eléctricas como necesidades de cada hogar.. En estas, el precio del kWh es inferior por la noche, mañanas y fines de semana, lo que te puede convenir si trabajas fuera.
También se ofrecen otras tarifas especiales para locales o negocios de gran consumo que combinan distintas potencias según el horario.
El problema es cuando hay confusión entre las dos modalidades más comunes: la tarifa plana y la cuota estable. Para evitar que haya problemas a la hora de elegir con cuál quedarte, te vamos a explicar cada una brevemente.
Para dejarlo todavía más claro te vamos a hacer una tabla que especifica todos los detalles de forma visual y rápida.
características de la cuota FIJA Y CUOTA VARIABLE | |
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Cuota fija | Cuota variable |
Precio fijo durante el contrato | El precio varía en función del mercado |
No tienes tope de consumo máximo | No hay tope de consumo máximo |
El precio se regula cada seis meses | No hay penalización porque el precio se ajusta al consumo |
Asegúrate de la procedencia de la energía
El origen de la energía es cada vez más determinante para los consumidores preocupados por el medioambiente. Por eso mismo, muchas empresas venden cosas que no son con el fin de que firmes y pagues.
Como consejo, realiza una pequeña búsqueda para corroborar que eso es cierto y comprueba que tienen una certificación digital de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) que respalda el origen de energías renovables y de cogeneración de alta eficiencia.
Por último, cuando hayas elegido la comercializadora, la tarifa, la potencia y todo, lee con atención todo el contrato. Ojo, no una lectura en diagonal ni por encima, además de tus datos, fíjate en la letra pequeña, el apartado de condiciones y pregunta acerca de cualquier cosa que te haga dudar.
En caso de que te “engañen” después será muy difícil echarse atrás o cancelar el contrato sin tener que pagar una penalización ¡y leer dos veces o tres el contrato no cuesta dinero!
De todas formas, en EnergyGO te ofrecemos información sobre nuestras tarifas de forma honesta y con una energía 100% verde. Si quieres saber más y no quedar con ninguna duda, lo mejor es que llames al 900 733 933 o entres en nuestra web.