¿Qué es la potencia activa?

La potencia activa es uno de los conceptos claves relacionados con los circuitos eléctricos y con su funcionamiento. Este término hace referencia a la capacidad que tiene un circuito para llevar a cabo un proceso en el que la energía eléctrica se transforma en trabajo.

La importancia de la potencia activa reside en que es la que realiza el trabajo útil dentro del circuito. Para medirla se emplean las unidades que son los vatios o los megavatios y aparece representada con la letra “P”.

La potencia activa tiene una antítesis que es la reactiva. Se trata de un tipo de potencia eléctrica que algunos equipos eléctricos extraen de la red y la retienen en sus circuitos interiores. La aportación de este tipo de potencia es prácticamente nula, simplemente se crea y se traslada de la red a los equipos. Aunque su extracción no supone un consumo.

Además, hay dos tipos de potencia reactiva, que son la inductiva y la capacitiva. Otro aspecto interesante de la potencia reactiva es que se mide en VAR y aparece representada con la letra “Q”.

¿Cómo se calcula la potencia activa? Fórmula

Para conocer en profundidad a la potencia activa y su fórmula hay que tener en cuenta a la potencia reactiva. El primer aspecto que tiene un peso importante en el cálculo de la potencia activa es el hecho de saber que es el producto del voltaje, la intensidad de la corriente eléctrica corriente y el coseno del ángulo entre ellos.

Potencia Activa = Voltaje x Intensidad de la corriente eléctrica x Coseno del ángulo entre ellos

La fórmula de la potencia activa se representa a través de un ángulo recto en el que se dibuja a la potencia activa en la línea de la base, a la potencia reactiva en la línea que se extiende hacia arriba, y a la potencia aparente en la diagonal que une el punto externo de la línea de base con el punto superior de la línea que se extiende hacia arriba.

También hay que tener en cuenta que la potencia aparente sería la suma de la energía que expulsa un circuito, más la energía que usa para que en sus componentes se formen los campos eléctricos y magnéticos que le permitan funcionar.