La transición energética aprieta más de lo que pueden ofrecer los fabricantes. El coche eléctrico evoluciona, pero no al ritmo que exigen las autoridades. Por eso los altos precios, las escuetas ventas y el envejecimiento del parque móvil en España.
¿Qué hacemos? Por el momento el EV es la única alternativa viable a la reducción de emisiones y la lucha contra el cambio climático. Eso sí, a largo plazo la pila de hidrógeno ya está posicionándose como una solución más efectiva.
Es limpia, sostenible y ayuda al medio ambiente, ¿Será el hidrógeno el combustible del futuro? ¿Para qué se usa esa pila? ¿Cómo funciona? Aquí te lo contamos.
Mucho ruido y pocas nueces. ¿Qué hay detrás de tanto marketing? La pila de hidrógeno es un dispositivo electroquímico que transforma la energía química del combustible que almacena — el hidrógeno — en energía eléctrica.
Obviamente, se utiliza mayoritariamente para nutrir el motor del coche eléctrico. Así que en realidad seguimos hablando de lo mismo que en los EV de siempre. Lo que cambia es la forma de obtención de la energía.
Si la pila de hidrógeno está generando tanto ruido es porque emplea como sustento el hidrógeno, claro. Y este es el componente más abundante del universo; un 75% de la materia y más del 90% de átomos. ¿Ves el porqué de su sostenibilidad?
Las pilas de hidrógeno se dividen en cuatro partes básicas
El hidrógeno presurizado (conocido comúnmente como H2) entra en la pila por la parte del polo negativo —el signo de menos— forzando este gas a través del catalizador con presión. Se suministra a altas presiones para que mantenga su estado líquido, ojo.
Cuando la molécula de hidrógeno entra en contacto con el platino que tiene el catalizador, se separa en 4 partes: 2 iones y 2 electrones.
Los electrones entonces se mueve a través del ánodo y llegan al circuito externo. Allí cumplen su función (alimentar el motor eléctrico) y vuelven a la pila descargada por la parte del cátodo.
Lo creas o no, todo esto se convierte en vapor de agua cuando el oxígeno pasa en el cátodo a través del catalizador. Ahí forma 2 átomos de oxígeno que están cargados muy negativamente.
Eso atrae a los iones que mencionamos antes que, al combinarse con dos electrones, vuelven al circuito. Todo esto junto forma una molécula de H2o. Es decir, de agua.
Resumiendo en pocos puntos: el hidrógeno se carga en el coche a alta presión, del gas se extraen partículas para generar electricidad, y las emisiones resultantes son únicamente en forma de vapor de agua.
El hidrógeno se puede producir de manera limpia a partir del agua (H2O). La cuestión es que la electrolisis requiere bastante energía y resulta demasiado costosa (demasiado para ser rentable)
Por este motivo el 90% del hidrogeno que se consume actualmente a nivel internacional proviene de lo que se conoce como "reformado". Es decir, de la combinación de vapor de agua y gas natural. ¿Problema? Que no es un método limpio ni sostenible.
El futuro de la pila de hidrógeno no pasa tanto así por la generación del propio H, sino por las energías que se emplean para lograrlo. Cuando la electrolisis sea rentable el futuro de este tipo de sistemas se verá más claro.
El eterno debate entre combustibles fósiles y energías renovables. La pila de hidrógeno ha llegado ahí para abrir otro melón interno dentro de las propias renovables. Ya no es solo acabar con la gasolina, sino hacerlo de la forma más sostenible.
Todo tiene su cara y su cruz, y la pila de hidrógeno presenta también una serie de desventajas o desafíos que impiden su total extensión:
Si la pila de hidrógeno todavía no está extendida es porque no se han resuelto del todo sus retos de escalabilidad. El coste y los materiales tan valiosos que emplea (platino) son algunos de los factores que no permiten su extensión.
Sin embargo, algunas tecnologías ya están sustituyendo esos materiales por otros mas accesibles. Esto ya está fomentando un cambio que genera un crecimiento en el mercado de las pilas de hidrógeno.
Por tanto, si los retos que hemos visto consiguen superarse, el hidrógeno podrá ser una excelente opción para convertir el planeta en un espacio más limpio de cara al futuro. Hasta entonces habrá que seguir confiándolo todo al coche eléctrico tradicional, que no es poco.
Desde EnergyGO siempre abogaremos por un cambio hacia el mundo verde y la transición energética. Si quieres trasladar también esa eficiencia a casa entra en nuestra web o llama al 900 622 500 y empieza a consumir la electricidad 100% limpia y nacional.