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¿Sabes qué es un superconductor y cuáles son sus ventajas para tu instalación eléctrica? Como su propia palabra indica, los materiales superconductores tienen una resistencia eléctrica nula y dejan pasar muy bien la electricidad. En este artículo te daremos algunos ejemplos y consejos para ahorrar energía en casa.
Desde la reducción de pérdidas de energía hasta un menor impacto ambiental, en las siguientes líneas descubriremos todos los beneficios de un superconductor y sus diferentes aplicaciones.
Un superconductor es un material capaz de conducir electricidad sin ofrecer resistencia. Dicho de otra manera, la corriente eléctrica puede circular de manera indefinida por un circuito cerrado sin perder de energía.
Este fenómeno fue descubierto por el físico holandés Heike Kamerlingh Onnes en 1911, quien observó que el mercurio, cuando se enfría a aproximadamente 4,2 Kelvin (-268.95 °C), deja de ofrecer resistencia eléctrica. Este descubrimiento supuso un antes y un después en el sector tecnológico.
Por otro lado, los superconductores permiten que los objetos magnéticos floten sobre ellos. Ahora bien, ¿qué tipos existen y para qué sirve cada uno? Pues estos se dividen en dos grandes categorías:
Estos materiales requieren temperaturas extremadamente bajas, generalmente por debajo de los 30 Kelvin (-243,15 °C). Aquí se incluyen los metales como el niobio y aleaciones como el niobio-titanio, utilizados en aplicaciones donde se puede mantener un enfriamiento constante.
Estos materiales tienen temperaturas más elevadas, generalmente por encima de los 77 Kelvin (-196 °C), lo que hace posible enfriarlos con nitrógeno líquido, más barato y fácil de manejar. Un ejemplo es el óxido de itrio, bario y cobre, conocido comúnmente como YBCO.
Los superconductores tienen una amplia gama de aplicaciones y estas son algunas de las más conocidas:
Una de las aplicaciones más conocidas son los cables superconductores para las instalaciones eléctricas. Estos cables tienen la capacidad de transportar grandes cantidades de electricidad sin perder resistencia. Esto permite una transmisión de energía mucho más eficiente que los cables convencionales de cobre o aluminio.
Los superconductores también se utilizan para fabricar generadores y motores mucho más compactos y eficientes. De esta manera, estos son capaces de generar una mayor potencia eléctrica que otras tecnologías, por lo que son perfectos sobre todo en centrales eléctricas y algunos medios de transporte como barcos y aeronaves.
En el campo de la medicina, los superconductores son esenciales para los tomógrafos de resonancia magnética, que utilizan imanes superconductores para generar imágenes detalladas del interior del cuerpo humano sin necesidad de radiación invasiva.
Ahora que ya sabes qué es un superconductor y cuáles son sus aplicaciones más destacadas, estos son sus principales beneficios:
Una de las principales ventajas de los superconductores es el ahorro de energía. A diferencia de las redes eléctricas convencionales, donde las pérdidas de energía son mucho más elevadas, los cables superconductores las reducen casi por completo y aseguran una gran eficiencia energética.
Los cables superconductores pueden transportar muchas más corrientes que los cables convencionales del mismo tamaño. Esto es especialmente útil en zonas urbanas, donde la demanda de energía es más alta y el espacio para nuevas construcciones puede ser bastante limitado.
Además, un material superconductor puede aumentar significativamente la capacidad de transmisión eléctrica sin necesidad de tener que ampliar el espacio físico disponible para nuevas líneas eléctricas.
Por otro lado, la resistencia eléctrica en los cables tradicionales puede provocar un calentamiento excesivo y un desgaste de los componentes, aumentando el riesgo de cortocircuitos, incendios eléctricos y otros accidentes domésticos. En ese sentido, los cables superconductores ayudan a mitigar este problema.
Que este tipo de material ofrezca una mayor eficiencia en la generación y transmisión de electricidad hace que los superconductores también sean mucho más sostenibles para el medioambiente.
Asimismo, reducir las pérdidas energéticas también disminuye la cantidad de combustible necesario para generar energía, lo que disminuye las emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera.
En definitiva, el uso de superconductores en instalaciones eléctricas promete transformar por completo la manera en que gestionamos y utilizamos la energía. Desde la eliminación de pérdidas energéticas y la reducción de costes hasta el aumento de la seguridad de las redes eléctricas.
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Ahorrar energía, mejorar la seguridad de tu instalación eléctrica o evitar accidentes son algunas de las ventajas del superconductor.
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