Persianas que suben y bajan, robots limpiadores, cerraduras automáticas, climatizadores autorregulables; las casas cada vez son más inteligentes, más confortables, y claro, más sostenibles.
Aunque desde fuera te pueda parecer que la domótica no es más que una moda tecnológica más rodeada de “cacharros” bastante caros sin mucho valor, la realidad es que sabiendo escoger bien (y sin pasarse) se puede lograr recortar la factura de la luz sin arruinarse.
Son muchas las opciones que ofrece este sector para optimizar nuestro gasto, pero la más accesible, sencilla y efectiva es la que representan los enchufes inteligentes; unos dispositivos capaces de acabar con el odioso stand-by.
Hablamos de un problema, que, de acuerdo con IDAE, representa nada más y nada menos que el 10,7% del consumo anual de electricidad. Vamos a hacer un cálculo muy sencillo para que tengas algo más de perspectiva.
Si tomamos la media anual española de 3.487 kWh, y un coste aproximado de 0,15 euros el kWh (recuerda que varía según la hora del día), llegamos a un gasto al año en electricidad de 523,05 euros. De estos, ¡55,95 euros serían por culpa del stand-by!
Para recortar semejante despilfarro existen los enchufes inteligentes. Por eso hoy te queremos contar cómo funcionan estos dispositivos y qué funciones tienen para que puedas ahorrar mucho dinero cada año.
No tiene mucho misterio; tienen la misma forma que un ladrón de pared tradicional, y sirven igualmente para conectar dispositivos a la red eléctrica. ¿Dónde está entonces la parte “inteligente"?
Pues bien, en lugar de tener un funcionamiento analógico (ir manualmente a poner o quitar el cable enchufado), estos dispositivos se apoyan en la conexión inalámbrica del wifi para que lo puedas hacer desde tu propio móvil.
Casi todos los modelos operan mediante la banda wifi de 2,4 GHz, que por otro lado es la más habitual en los smartphones actuales. En cualquier caso, siempre permiten conectarse a través de Bluetooth y de otros protocolos más modernos.
Si nos dejamos de tecnicismos, la realidad es que a la hora de la verdad la mayoría de los usuarios compran enchufes inteligentes para conectarlos a su casa “smart” y manejarlos sincronizadamente desde Google Assistant, Siri o Alexa.
Así pues, lo único que necesitas para meterte en este mundillo es asegurarte de que tienes espacio suficiente en casa (suelen ocupar más espacio que los normales), tener wifi operativo, y descargarte la app de turno que indique el fabricante.
¿Para qué? Te preguntarás. Dejando de lado lo que ya hemos mencionado de la conexión y desconexión, este tipo de enchufes también sirven para:
“Por medio de aplicaciones para introducir habilidades IFTTT (siglas de ‘If This Then That’) puedes dotar de instrucciones a tus enchufes inteligentes y crear escenarios condicionales (si pasa ‘x’ que suceda ‘y’)”, señalan desde Aparatos Inteligentes.
Es normal que, si no conoces nada sobre este mundillo, te dejes llevar primero por los precios, y segundo por los diseños. En un caso podrías caer en el conocido “lo barato a veces sale caro”, y en otro acabar con un producto que no encaja del todo con tus necesidades.
Esto es fácil de solucionar. Aunque los fabricantes ofrezcan una gran cantidad de detalles en las fichas técnicas de sus enchufes, la realidad es que para el día a día solo te interesa conocer algunos aspectos fundamentales:
¿Y qué pasa con el precio? la cantidad a pagar siempre tiene que entrar en el rango amortizable a largo plazo. Si te gastas demasiado en un modelo muy bueno, quizás nunca recuperes el dinero en ahorro energético.
Por eso es recomendable empezar por los más baratos, y poco a poco ir probando otros enchufes más caros. Ten en cuenta que puedes llegar a gastarte más de 100 euros en según qué marcas.
En verano lo más lógico será programar el enchufe para que el ventilador o el aire acondicionado dejen de funcionar a una hora determinada (dejarlo toda la noche puede disparar tu consumo).
Si entramos en casos más superfluos, los enchufes son prácticos para apagar la televisión sin levantarte del sofá, manejar algunos aparatos de la cocina para ser más multifuncional, o, por ejemplo, encender la nevera antes de volver de vacaciones, para que esté lista a tu llegada.
¿Qué otras cosas pueden hacer estos dispositivos? En realidad depende un poco de la originalidad que tengas y de tus necesidades. A más dispositivos conectados, más posibilidades:
Las aplicaciones de los enchufes inteligentes son prácticamente infinitas. Eso sí, para sacarles el máximo partido antes asegúrate de contar con una tarifa eléctrica sostenible. Una como la limpia y nacional que te ofrecemos en EnergyGO.
Infórmate en nuestra web o llamando al 900 622 700.