La tensión nominal es el valor de la diferencia que hay en la potencia que se encuentra en una instalación eléctrica o en un dispositivo electrónico. Se trata del tope máximo de energía que puede soportar un determinado aparato.
Para medir la tensión nominal es necesario recurrir a un aparato que es el voltímetro. Este dispositivo está diseñado para determinar numéricamente la cantidad de potencia que se encuentra en una instalación o en un dispositivo eléctrico.
Hoy en día se pueden encontrar diferentes tipos de voltímetros y los electromecánicos son los más adecuados para cuantificar la potencia nominal.
Los estudios realizados que buscan establecer una media de la tensión nominal en España indican que el voltaje general de las construcciones de este país es de 230V. Aunque las últimas actualizaciones muestran que hay lugares en los que esta cifra puede aumentar hasta los 380V o 400V.
Las instalaciones trifásicas están formadas por tres corrientes alternas que se agrupan en tres fases y que dividen en tres partes la potencia que se encuentra en una instalación. Actualmente, los valores de una instalación nominal trifásica se sitúan en torno a los 380 o 400V.
La diferencia entre la tensión nominal y la de servicio se establece en que la primera de ellas es la tensión general que se determina cuando se diseña un sistema eléctrico, mientras que la tensión de servicio es la que se localiza en un punto concreto de la red eléctrica y en un momento determinado.
Para averiguar la tensión nominal de un cable se debe utilizar una herramienta que recibe el nombre de multímetro. Este dispositivo es muy útil porque confirma el paso de la tensión por un cable y, además, indica cuál es la potencia exacta de esa misma tensión.