Qué hago con la piscina en invierno: consejos de mantenimiento

Tras meses y meses de uso intenso, llega el momento más complicado del mantenimiento. ¿Qué hago con la piscina en invierno? Aunque siempre está la opción de climatizarla, puede que esto no te compense. Sea cual sea tu caso, aquí te damos unos consejos de cuidado para el invierno.

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Consejos para mantener tu piscina en invierno

Tanto si aprovechas tu piscina en invierno y verano como si prefieres cerrarla durante los meses más fríos del año, deberás ocuparte sí o sí de su mantenimiento. De esta manera, evitarás perder agua, energía y dinero.

Además, si tu piscina es exterior, puede haber riesgo de heladas y es muy importante saber qué hacer en estos casos. Así evitarás que la piscina se estropee y podrás darle el uso que se merece cuando vuelva el calor. Lógicamente, esto requiere hacer un esfuerzo, pero es más fácil de lo que crees.

Este proceso se conoce como hibernación o invernaje de la piscina y consiste en adaptarla a las condiciones climáticas del invierno. A continuación, te damos varios consejos para cuidar tu piscina:

Depuración del agua

Aunque no te bañes en pleno invierno, salvo que tengas una maravillosa piscina climatizada, es fundamental depurar el agua. Para ello, necesitas una depuradora o sistema de filtración que ayude a limpiar la piscina.

Ten en cuenta que todas las piscinas son iguales. Por ejemplo, las piscinas desbordantes son las más cómodas de limpiar. Como su propio nombre indica, el agua se desborda por la parte inferior y va directamente al sistema de filtrado. De esta manera, se mantiene mucho más limpia.

Como es normal, el agua contiene impurezas y se acumula suciedad. Por eso, tienes que hacer una limpieza al menos 1 o 2 veces por semana. Al fin y al cabo, tener una piscina en casa conlleva una responsabilidad y un gasto. Sin embargo, luego podrás disfrutar de ella. Para la depuración, necesitarás una bomba de agua.

Invernador para la piscina

El invernador es un líquido que se aplica en la piscina para conservar el agua durante el tiempo que no vayas a utilizarla. Normalmente, se suele usar un par de veces al año: cuando empieza a hacer más frío y cuando ya es invierno. Más o menos, su aplicación debe ser una vez cada 6 meses.

También sirve para eliminar bacterias y toda la suciedad que se vaya acumulando tanto en la superficie como en las profundidades de la piscina. Sin embargo, nosotros te aconsejamos usar el invernador tantas veces como necesites.

pH o calidad del agua

De nada te sirve desinfectar la piscina con determinados equipos y productos químicos si no sabes cómo medir el pH o acidez del agua. Este medidor utiliza una escala que va del 0 al 14. Para que este sea óptimo, debe ser neutro o estar ajustado en torno al 7.

¿Y cómo se mide el pH? Pues existen varios aparatos o sustancias que se encargan de medirlo. Las más utilizadas son el fotómetro y las pastillas o tiras reactivas, que miden el cloro y el pH del agua de la piscina.

Limpieza profunda

Para realizar una limpieza profunda de tu piscina, deberás usar un limpiafondos. Tienes dos modelos para elegir: manual y automático. El mejor es el manual, ya que podrás limpiar las zonas que desees. Aunque el automático te pueda parecer más cómodo, no llega a eliminar toda la suciedad.

A la hora de limpiar y mantener la piscina, el cloro es imprescindible. Se trata de una sustancia química para desinfectar el agua y para prevenir la aparición de bacterias y algas.

Conservación del agua

Una de las dudas más habituales respecto al mantenimiento de una piscina es si debemos extraer el agua o no. Vaciarla no es una tarea que puedas hacer en un momento, pero llenarla tampoco.

En este caso, lo mejor es que conserves el agua durante el inverno. Así ahorrarás muchos litros de agua. Además, gastarás menos dinero y contribuirás al cuidado del medioambiente. Eso sí, tendrás que cambiar el agua cada dos o tres años.

Si no hiciste el invernaje o mantenimiento de invierno, sí que tendrás que vaciar la piscina. Por eso, lo más conveniente es que cuides la piscina todo el año. Asimismo, evitarás que se dañe el vaso o estructura de la piscina.

Además, el estado del agua dependerá de la zona en la que vivas. No es lo mismo vivir en un lugar muy frío que en un punto más cálido en España. Como te decíamos al principio del artículo, deberás cuidar más o menos tu piscina según cuál sea la temperatura ambiente o condiciones climáticas.

Cubiertas para piscina

Existen diferentes tipos de cubiertas: lonas de poliéster para recubrir la piscina, cobertores de PVC, mantas térmicas para el invierno, etc. Aquí tendrás que valorar cuál se ajusta mejor a tus necesidades. No obstante, todos ayudan a proteger el agua en temporadas de mucho frío, regular la temperatura e incluso evitar caídas.

Es muy importante que estén bien colocadas, para evitar que se muevan y que los rayos de sol penetren sobre el agua de la piscina. No solo impedirá que se produzcan heladas. También servirá como filtro, para dificultar la entrada de bacterias.

Ventajas de mantener tu piscina en invierno

En definitiva, el buen mantenimiento de tu piscina durante todo el año te permitirá ahorrar en tu factura energética y de agua. Esto se debe a que no tendrás que vaciar y volver a llenar la piscina, después de muchos meses sin utilizarla.

Por otro lado, si decides usar una piscina climatizada, con una bomba de calor o con calentadores de gas también podrás ahorrar electricidad en invierno. Tampoco tendrás que cambiar las tuberías de la piscina, pues mantenerlas correctamente hará que sea mucho más difícil que puedan estropearse.

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