Por fin es 21 de marzo y eso sólo significa una cosa: ¡ya es primavera! Atrás queda el invierno y, aunque aún sea pronto para guardar el abrigo, asoma el buen tiempo. Buen momento para ahorrar energía en casa. ¡Apunta estos consejos!
Es increíble la cantidad de dinero que vas a poder ahorrar al reducir tu consumo energético aplicando estos consejos.
Hoy damos la bienvenida a la época primaveral del año. Sin embargo, no será hasta la noche del sábado 25 al domingo 26 de marzo, cuando se produzca el famoso cambio de hora.
Esto quiere decir que, cuando el reloj marque las 2 de la madrugada, habrá que adelantarlo a las 3. Este cambio hará que podamos aprovechar por más tiempo las horas de luz. Por tanto, ahorraremos energía.
Es lo que se conoce como Hora del Planeta. Si apagamos antes las luces en casa, seguro que a final de mes lo notaremos en el precio de la factura de la luz y el medioambiente también nos lo agradecerá.
¿Sabías que los rayos de sol son vitamina D para tu cuerpo? Pues además de buenos para tu salud, son imprescindibles para la vida del planeta Tierra.
Así que aprovecha la luz solar y déjate de estar con las luces encendidas en casa todo el día. Hazlo sólo cuando sea necesario, una vez se haga de noche y no tengas más remedio. Sin duda, el mejor truco para ahorrar energía eléctrica.
Por increíble que te pueda parecer, con una ducha rápida de sólo 5 minutos gastas unos 100 litros de agua. Imagínate si decides darte un baño para relajarte. El gasto de agua es muy elevado.
Sobre todo, si tus duchas suelen ser con agua caliente, el precio de tu factura sube. Por un lado, el agua y, por otro, la energía eléctrica. Aprovechando la llegada del calor, puedes usar agua fría o templada.
Con la llegada de la primavera, el buen tiempo y más horas de luz en la calle, es inevitable que quieras pasar más tiempo fuera de casa. El ambiente en las terrazas comienza a recuperarse.
Sin embargo, te recomendamos que utilices bombillas LED durante el tiempo que estés en casa. Por un lado, vas a ahorrar energía en el hogar aprovechando la luz solar y con iluminación sostenible.
A diferencia de las bombillas convencionales, éstas iluminan con mucha más potencia y además duran mucho más tiempo. Ni hablemos de que contaminan menos. Eso sí, nada como la luz natural.
Pero con moderación. No sólo porque abusar del aire acondicionado pasará factura a tu salud y no es recomendable que duermas con el ventilador encendido. El aire también gasta.
No es ningún secreto que cualquier ventilador o aparato de aire acondicionado consume energía eléctrica. Aunque los dispositivos más modernos consuman menos, no hace falta que tu casa parezca el Polo Norte.
El consumo dependerá de las frigorías, pero los expertos advierten de que poner el aire más de 4 horas al día hará que tu factura mensual de electricidad sea un 25% más alta. Hazlo con responsabilidad.
Si acabas de llegar a casa, después de trabajar todo el día, te recomendamos que ventiles tu casa. No es necesario que enciendas enseguida la calefacción. Si todavía hay luz, abre bien las ventanas y los rayos de sol calentarán un poco tu vivienda.
Utiliza todos los recursos que estén a tu alcance para calentar tu casa. Si hace un día de mejor tiempo, quizá no haga falta poner el calefactor o, al menos, no a máxima potencia.
En ocasiones, sólo con la luz del sol conseguirás templar la temperatura ambiental de casa y sin necesidad de recurrir siempre al gas o a la electricidad.
Está claro que en pleno invierno no queda otra. Enciendes la calefacción para todo el día y sólo la apagas cuando te vas a dormir o cuando no hay nadie en casa. Ahora las cosas cambian.
En primavera no hace falta que consumas tanta energía con el calefactor para calentarte en casa. Estos son algunos trucos para que tu hogar retenga mejor el calor:
Siempre y cuando quede bien iluminada tu vivienda, lo que puedes hacer es bajar las persianas y evitar que entre el frío. Una vez que tu casa haya alcanzado una buena temperatura, apaga la calefacción y haz que se mantenga por más tiempo el calor con este sencillo truco.
Evita que se escape el calor por las puertas y las ventanas. Para ello, puedes instalar burletes. Estos elementos de goma, una vez colocados correctamente, evitarán que se produzcan fugas de calor en tu casa.
A diferencia de las convencionales, este tipo de cortinas disminuyen la pérdida del calor en casa. Hasta que llegue el verano, no pasarás frío en los días más frescos de primavera. Además, ahorrarás en calefacción.
Si no conocías este truco, te va a gustar. Se trata de unas láminas que van pegadas a las ventanas y que pueden absorber hasta un 80% del calor exterior. ¿Lo mejor? Que puedes utilizarlas tanto para el frío como para el calor. Harás que tu casa alcance la temperatura ideal.
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