“Peli y manta” sí, pero suena mejor: “peli, manta y estufa halógena”. Son un buen complemento, aunque tengas calefacción. Y si no tienes, son la mejor opción para calentarte.
Este tipo de estufas tienen numerosas ventajas: pueden ser transportadas de forma fácil y sencilla, tienen un precio económico, producen gran cantidad de calor en un determinado punto y, además, son silenciosas. ¡Todo son cosas buenas!
Entonces te preguntarás: ¿cuáles son las mejores estufas halógenas para calefacción? En EnergyGO te queremos mostrar el ranking de estufas halógenas que necesitabas pero no sabías.
Lo primero que te estarás preguntando es qué son y por qué no tienes una en tu casa. Pues bien, este tipo de sistemas son estufas eléctricas que están formadas por pequeños tubos de vidrio.
Dentro de esos tubos hay un metal enroscado y gas halógeno. Por eso, cuando circula la electricidad calienta el metal y esto provoca una combustión con el gas y ¡voilá! Ya tienes calefacción.
Este tipo de estufas halógenas consiguen una mayor eficiencia en las zonas bajas de las habitaciones por su tamaño y por la radiación que producen.
Generalmente consumen una potencia que va entre los 400 y 1200 W, pero esto dependerá del modelo que elijas.
Ya sabes qué son, pero ahora quieres conocer cuáles son las mejores estufas halógenas del mercado. No te preocupes porque por aquí hemos hecho una selección que te va a interesar.
Imagina que estás con esta estufa halógena en tu casa. De repente tu perro pasa por delante y la tira, ¿comienza el desastre? No, porque este tipo de estufas halógenas tienen un sistema integrado que detienen su funcionamiento en caso de vuelco o accidente. Disponen de un termostato regulable, por lo que podrás disfrutar de hasta tres niveles: ECO con 400 W, nivel medio con 800 W y alto con 1200 W. Puede calentar estancias de hasta 10 metros cuadrados rápidamente. Sin embargo, cuidado porque su cable es muy corto, lo que te impedirá transportarlo. Además, emite mucha luz y puede resultar molesto.
Este modelo dispone de una potencia que va desde los 400 W hasta los 1200 W. Sin embargo, no tiene termostato, por lo que no podrás elegir el nivel que quieras. Al igual que el anterior modelo, tiene un sistema antivuelco con el que se apagará inmediatamente al caerse. Una de las características de este tipo de estufa halógena es su diseño. Cuenta con un asa que facilita su transporte.
Este tipo de estufa halógena disponen de una potencia de hasta 1200 W. Lo que la diferencia de los anteriores modelos es su base oscilante que permite que se gire 90 grados. De esta manera, podrás calentar distintos sitios de tu casa de forma rápida y sencilla. Lo único malo de este modelo es la luz que irradia. Es demasiado fuerte y puede molestarte en las noches.
Este modelo de estufa halógena dispone de dos potencias: 400 W y 800 W. Podrás elegir aquella que mejor se adapte a tus necesidades, ya que también tiene termostato de doble función. Además, cuenta con una protección contra sobrecalentamiento. Con este tipo de sistema no tendrás que preocuparte por su calentamiento, ya que se regula a sí mismo. Su forma estética también es un plus. Esta estufa halógena permite colocarla tanto en posición vertical como en horizontal al estar formada por partes iguales. Aún no te hemos contado lo mejor: podrás usarla hasta en verano, ya que también dispone de un sistema con el que expulsa aire frío. ¡Calefacción y aire acondicionado todo en uno!
Con su base oscilante de 90 grados este modelo te permitirá calentar diferentes lugares a la vez. Dispone de dos potencias que son de 600 W o de 1100 W. Cuenta con sistema antivuelco y con un termostato regulable por lo que controla su temperatura por sí solo. El único inconveniente de este modelo es el material del que está hecho. Es muy frágil por lo que se puede dañar con facilidad (si tienes un gato está claro que no es la estufa halógena que buscas).
Este modelo cuenta con dos tipos de potencia: de 400 W y de 800 W. ¿Entonces qué lo hace diferente de las demás? Pues su diseño extraplano que permite guardarla y transportarla con total facilidad. Y esta estufa halógena es pequeñita, pero muy eficiente. Te permitirá calentar cualquier estancia gracias a su radiador de cuarzo.
Este modelo está creado específicamente para colocarlo en las paredes de los baños. Tiene tres niveles de potencia: 500 W, 1000 W y 1500 W. Además, cuenta con un sistema de protección que impide el contacto con las barras de calor. ¿Cómo puedes instalar este tipo de estufa halógena? Muy sencillo, trae consigo un kit para que puedas colocarlo en tu baño o en cualquier estancia pequeña.
Al igual que el anterior, este modelo es perfecto para colocarlo en las paredes de los baños debido a su forma alargada y plana. Además, dispone de un sistema antisalpicaduras y una placa protectora. Esto te permitirá estar mucho más seguro cuando utilices agua cerca. Dispone de potencias de 600 W y 1200 W y un termostato regulable que se ajustará a las necesidades climáticas de la estancia. De esta forma, podrás ahorrar en la factura de la luz. Eso sí, te tenemos que advertir que esta vez el montaje no es tan sencillo y puede costarte un poco más. ¡Grandes resultados suponen grandes esfuerzos!
Una vez que te hemos mostrado cuáles son las mejores estufas halógenas para calefacción, llega la hora de que elijas aquella que mejor se adapte a tus necesidades. Elijas lo que elijas te aseguramos que pasarás un invierno sin frío.
Si quieres conocer más tipos de calefacción, no dudes en visitar nuestra web. También puedes llamar al 900 622 700 y enterarte de los mejores trucos para ahorrar en tu factura de la luz que tenemos en EnergyGO.