¿Cómo saber si me están pinchando la luz?: acciones y consejos

A veces la necesidad —y la picardía— son superiores a los desincentivos legales. Quienes pinchan la luz para disfrutar de ella sin pagar, lo hacen casi siempre a sabiendas de las multas a las que se exponen.

Y no, no hablamos de unos pocos cientos de euros. De acuerdo con la Ley Orgánica 15/2003, de 25 de noviembre, las sanciones oscilan entre los 1.000 y 2.000 euros. “Será castigado con pena de multa de tres a 12 meses el que cometiere defraudación por valor superior a 400 euros”.

La administración siempre tomará como referencia datos objetivos cedidos por la distribuidora en plano supuesto, pero si esta no los puede ofrecer, la ley también contempla una medida general a aplicar.

“La empresa distribuidora la girará facturando un importe correspondiente al producto de la potencia contratada, o que se hubiese debido contratar, por seis horas de utilización diarias durante un año, sin perjuicio de las acciones penales o civiles que se puedan interponer”.

Parecen penas suficientes como para desincentivar el delito. La realidad es que aún así hay muchas familias e individuos que siguen pinchando la luz. ¿Qué pasa si eres tu la víctima? Como es una situación muy particular, pocas personas saben qué pasos deben dar a continuación.

Lo primero de todo será identificar realmente si es así; si nos están robando electricidad. O si tan solo se debe a una sospecha por algún tipo de error de parte de la comercializadora o la misma distribuidora. Sigue leyendo y ponte al día.

Qué hay que hacer para saber si me están pinchando la luz

El primer paso es bien sencillo e intuitivo. Acudes al contador y apuntas el consumo total que aparezca en la pantalla. No importa que sea analógico o digital, la cifra la encontrarás fácilmente si prestas un poco de atención.

Con eso te vas al cuadro eléctrico de casa y antes de nada bajas todos los interruptores. Habitualmente se recomienda bajar solo el general, pero aquí es conveniente hacerlo con todos y esperar unos 30 minutos para asegurarnos de que el conteo ha parado.

En teoría no debería estar registrándose ningún tipo de consumo. Y es ahí donde tienes la oportunidad de saber si te han pinchado la luz. Para comprobarlo tendrás que prestar atención a cosas distintas dependiendo del tipo de contador.

• Analógico: en esta clase de contador el consumo se mide con una ruletita que va girando a medida que se registra la información. Si no se mueve es que no se está consumiendo nada. ¿Que lo hace? Mira los kwH que apuntaste y si son inferiores es que te están robando.
• Digital: en lugar de una ruleta aquí lo que encontrarás será un led de color rojo. Si está fijo es sinónimo de que no se está consumiendo nada. En cambio, si parpadea probablemente nos están pinchando la luz. Revisa igualmente el consumo anotado para salir de dudas.

En caso de que tengas ganas de trastear, el contador digital también te permite navegar por un menú interno para llegar hasta la información que buscas. Hay que acceder al modo lectura, navegar hasta L4 INFO y después llegar a L43 V INST.

Si la cifra mostrada no es 000.0 A, eso significa que estaremos siendo víctimas de algún tipo de manipulación. Te recomendamos que repitas la operación varios días salteados para comprobar que es algo continuado.

Me están pinchando la luz: ¿Y ahora qué hago?

Lo primero es ponerte en contacto con la distribuidora que te corresponda por domicilio. Desde ahí te facilitarán todos los trámites necesarios para interponer una denuncia que puede ser completamente anónima.

Al mismo tiempo puedes llamar a tu comercializadora para hacerla sabedora de la situación. En Energy GO, por ejemplo, ponemos a disposición tanto nuestro número de teléfono como el correo electrónico [email protected] para que nos lo hagas llegar.

Eso sí, antes de ponerte en contacto asegúrate de tener a mano la mayor cantidad de información posible sobre tu suministro; lo incluye tanto la ubicación mediante dirección postal como el CUPS.

Dependiendo de la compañía es posible que tengas que dejar otros datos personales y hasta adjuntar imágenes que puedan servir de pruebas a la hora de interponer la denuncia. Desde ese momento solo cabe esperar a que se solucione la situación.

Cabe mencionar que la mayoría de comercializadoras y distribuidoras ya se curan de espanto incluyendo distintas medidas de seguridad automáticas que identifican al instante cuándo algo no marcha según lo indicado.

¿Y si me acusan a mí de estar enganchado?

Aunque no es lo más habitual, también existen casos en los que la compañía acusa directamente al particular, interponiendo hasta la denuncia para cobrar la multa. El problema es que a lo mejor no eres culpable y te están cargando de forma arbitraria.

En estos casos, el primer paso a dar seguirá siendo acudir a los canales de comunicación de la comercializadora para pedir un informe de inspección. Seguramente no te funcione porque desde su lado ya habrán estudiado la situación para alegar el delito.

A partir de ese momento entra en juego tu interés por resolver la situación, el tiempo del que dispongas y, claro, la paciencia. Puedes contactar con organizaciones de consumidores como OCU o FACUA para que te echen un cable.

También existe la figura del Defensor del Pueblo, en la que se ofrece un formulario online para enviar quejas y reclamaciones. Y ya por último, siempre podrás acudir al Sistema de Arbitraje de Consumo.

No te sientas tentado a pinchar la luz

Por si no fuera ya de peso el argumento de la seguridad y el cumplimiento de la ley, has de saber que el marco normativo no te permite hacer de Robin Hood. Es decir, que por manipular el contador no vas a causarles ningún daño a las compañías eléctricas.

Esto es así porque hay una parte de la factura de la luz que va destinada precisamente a sufragar las pérdidas de la red. No siempre hablamos de fraudes particulares, sino también de accidentes en el transporte y de la gestión del excedente energético.

En cualquier caso, si pinchas la luz o manipulas el contador para pagar menos, en realidad estarás perjudicando a todas las personas que sí pagan religiosamente su consumo de electricidad. Vamos, que es tirar piedras sobre tu propio tejado.

Ya existen muchos métodos y hábitos caseros que permiten ahorrar luz sin caer en ilegalidades. Las nuevas tarifas por discriminación horaria permiten ajustar mejor que nunca las necesidades de cada uno a la potencia contratada. No hay excusas.

Y si tienes dudas, siempre puedes acudir a alguien de confianza para que te asesore. En EnergyGo estaremos encantados de medir tu consumo, mejorar lo que estás pagando y garantizarte un servicio de calidad con energía 100% limpia y española.

Llama al 900 622 700 o entra en nuestra web y empieza a hacer un consumo responsable sin picardías o métodos éticamente cuestionables.

Además, ahora y hasta el próximo 15 de septiembre, si decides dar el paso disfrutarás de un descuento de 50 euros en tu factura de la luz, repartidos en 5 descuentos de 10 euros al mes durante los primeros cinco meses desde la activación.