Más que el abandono del coche de gasolina, que el uso de aerosoles o que cualquier otra medida para reducir las emisiones de CO2; renovar los electrodomésticos es la medida más efectiva para combatir el cambio climático.
Ya hace más de una década distintos estudios llegaron a la conclusión de que renovando todos los electrodomésticos de Europa se conseguiría recortar 18 millones de toneladas de CO2 enviados a la atmósfera. Desde entonces se ha hecho un gran trabajo al respecto.
Estas impactantes cifras son las que explican por qué, a diferencia de otros sectores en los que se considera un valor añadido, el progreso tecnológico del sector de los aparatos domésticos es tan importante.
Y es que, para poder ahorrar con el lavavajillas o el frigorífico, es necesario contar con un modelo de última generación. Por mucho que intentes recortar el consumo de la lavadora, te va a ser imposible si sigues manteniendo aquella que te venía ya con la casa en 2006.
"La elección de electrodomésticos con un bajo consumo energético contribuye a la reducción de la emisión de gases de efecto invernadero", explican desde el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico. Tu camino al ahorro empieza en la propia compra.
Y de todo esto partió la invención del sistema de etiquetas de eficiencia energética actual. Estas pegatinas no solo te ayudan a encontrar el electrodoméstico que menos consume, sino que también incentiva a las marcas a seguir mejorando sus productos.
¿Por qué te contamos todo esto? Pues porque para ahorrar electricidad con tus electrodomésticos vas a necesitar que cuenten con el famoso programa ECO. En este artículo te damos unos consejillos para usarlo con cabeza en cada frente de la casa.
Es importante remarcar una cosa. El programa ECO no es una abreviatura de "ecológico", sino de "económico". Con esto queremos decir que no siempre se va a reducir la huella de carbono, pese a estar recortando la factura que pagamos a final de mes.
De esto llegamos a una idea principal: se suele vender el programa ECO como la panacea de todos los problemas energéticos. Y ojo, que al usarlo hay que seguir teniendo en cuenta muchos factores de consumo. Ya te sonará un poco todo eso.
Seguro que el programa ECO de tu lavavajillas y de tu lavadora dura muchos más minutos que los demás. ¿Cómo va a ahorrar energía si pasa más tiempo funcionando? Bueno, es una confusión lógica que tiene que ver con la cantidad de energía empleada.
Este tipo de configuraciones reducen, por ejemplo, la temperatura empleada, y por tanto necesitan más minutos para conseguir resultados satisfactorios de limpieza. Lo que nos lleva a afirmar rotundamente dos grandes verdades:
Respecto a los lavavajillas, el programa ECO suele emplear una hora más aproximadamente que el programa normal. Por ello, es recomendable utilizar este tipo de programas cuando podamos esperar a que terminen con total tranquilidad.
¿Todo por el ahorro? ¿Y si tienes prisas) ¿Y si esa mancha del pantalón no sale ni para atrás? El programa ECO de los electrodomésticos es objetivamente interesante desde el punto de la eficiencia, pero no siempre ofrece la mayor comodidad en todas las situaciones.
| PROGRAMA ECO | |
|---|---|
| VENTAJAS | DESVENTAJAS |
| Reduce la cantidad de agua empleada | Dura una hora más de media que los programas convencionales |
| Reduce la cantidad de electricidad consumida | No es eficaz contra manchas complicadas |
| Minimiza el ruido (db) del electrodoméstico | No es recomendable en funciones de aclarado |
| Ayuda a combatir el cambio climático | |
Cuidado, porque que te hablemos de ventajas y desventajas del programa ECO no quiere decir que haya dudas sobre él. De hecho siempre hay que tenerlo en mente a la hora de comprar cualquier electrodoméstico. Que luego no lo vayas a usar siempre es otra historia.
¿Y cómo encuentro el aparato con el mejor programa ECO? Como no te vas a poner a leer todas las especificaciones técnicas del mercado al final lo más recomendable es que estudies las etiquetas de eficiencia energética.
Hoy por hoy es raro encontrar electrodomésticos sin programa ECO. La cosa es que entre un lavavajillas B o A+ van a existir unas diferencias importantes dentro de la propia eficiencia del programa. Así que mantente siempre al loro.
El funcionamiento del programa ECO es diferente en cada electrodoméstico porque básicamente cada aparato tiene un objetivo distinto. Su configuración estará centrada en el recorte de agua, electricidad y/o temperatura dependiendo del caso.
A continuación te dejamos algunos consejos para sacarle el máximo partido en todos los frentes de gasto de casa. Bueno, más que "consejos" son advertencias.
De acuerdo con la OCU, el programa ECO del lavavajillas consume un 16% menos de agua y un 20% menos de electricidad que el normal. En términos financieros supone un ahorro anual de 7,7 euros. Nada mal ¿eh?
Eso sí, como contraparte viene con casi una hora más de duración; de las 2 horas y 8 minutos de media del normal, a las más de 3 horas del ECO. Por eso lo recomendable es usarlo por las noches, cuando tienes más tiempo para estar pendiente. Eso sí:
El programa ECO de la lavadora consume un 33% menos de electricidad por ciclo que el normal y un 36% menos de agua que el convencional de algodón. Ahora bien como sucede con el lavavajillas, la eficiencia en algunos frentes es ligeramente inferior.
La duración media de uno de estos programas es de unas 3 horas; 39 minutos más que los 183 que señala la OCU como media tomando de referencia casi 20 modelos modernos del mercado. Muy a tener en cuenta.
El programa ECO de la nevera es completamente distinto al del resto de electrodomésticos. Se trata de un modo pensado para minimizar el consumo cuando nos vamos de vacaciones o prevemos pasar muchos días sin utilizarlo a gran carga.
Balay cuenta que esta configuración aplica la máxima temperatura posible al frigorífico, reduciendo con ello el esfuerzo energético que tiene que hacer para enfriar los alimentos. Si en normal funciona a unos 5ºC, en ECO a lo mejor aumenta hasta 8ºC.
El horno no suele incluir un programa ECO como tal, sino que incluye parámetros específicos para cada uno de sus modos. Si tienes un horno moderno ya sabrás que cuenta con muchas configuraciones distintas para cada tipo de alimento.
Empezar mirando el manual puede ser interesante para ahorrar con las funciones ECO. De todas formas, más allá de quedarte con el apellido del modo, deberías guiarte por las temperaturas recomendadas. No querrás que tu plato se queme o se quede crudo.
Aunque sí que hay programas ECO de tv que funcionan como en el resto de electrodomésticos, lo normal en este aparato es que el propósito de ese modo tenga que ver más con cuestiones de programación.
Es decir, que hay marcas que reducen el brillo y la temperatura de la pantalla y que otras se limitan a añadir un apagado automático tanto de sonido como de imagen cuando pasa determinado tiempo. Ideal para no dejarse la tele encendida.
Si no eres un pureta de lo multimedia, vas a poder ahorrar mucha electricidad con tu tele renunciando a algo de comodidad y calidad de imagen. Recuerda que siempre puedes cambiar la configuración cuando vayas a ver una película o a jugar a algún videojuego.
Llegados a este punto ya sabrás dominar el programa ECO de tus electrodomésticos. Ahora es turno de respaldar ese esfuerzo desde la energía. Entra en nuestra web o llama al 900 622 700 y provee a tu hogar de la electricidad 100% limpia y nacional de EnergyGO.
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