A todos nos llama la atención caminar por las calles de las grandes ciudades y ver carteles y rótulos brillantes por todas partes. En los últimos años se han puesto de moda hasta en lámparas y carteles decorativos. ¿Es el neón mejor que el LED?
La opción más económica siempre pasa por utilizar tubos fluorescentes como los que se utilizaban anteriormente en los rótulos con forma de caja. El tema es que las formas de las letras y dibujos que tienen imposibilitan utilizarlos, así que esra vía queda fuera.
Por eso, en la actualidad contamos con dos opciones disponibles: Neón o LED.
Si bien, toda la vida los letreros de neón han sido usados tradicionalmente en cuanto a la publicidad comercial, el mercado LED ha entrado con fuerza en ese nicho. De hecho, hay algunos carteles que se comercializan como productos de neón y no lo son.
Por ello, vamos a diferenciarte cuáles son las luces de LED y neón, sus características, consumo y recomendación antes de elegir entre uno u otro.
La diferencia más obvia es que la iluminación de neón viene dentro de un tubo de cristal. Esta iluminación se crea a raíz de reacciones con el gas inerte que hay en su interior y que libera energía en forma de luz fluorescente.
Es cierto que están elaborados cuidadosamente y de forma manual, pero son altamente frágiles. Si no los tratas con cuidado puede dañarse y entonces la corriente no fluirá. Es un mecanismo automático para evitar accidentes indeseados.
Esta seguridad y tranquilidad que da a los usuarios es uno de los motivos por los cuales han sido durante mucho tiempo los preferidos, sobre todo por los empresarios.
La tecnología LED lleva años entrando en nuestra vida para mejorar eficiencia y reducir gasto. Los letreros imitadores de neón con tecnología LED utilizan dos emisores que se unen para que la luz se superponga y así crear una fuente de luz constante.
Por norma general, los letreros LED tienden a ser más livianos y resistentes, por lo que no debes preocuparte por caídas desde la pared o cualquier otro soporte de límite determinado.
También cuentan con una buena protección de polímero para asegurar cada diodo de posibles daños externos. Evidentemente el precio y ahorro que supone tener un LED es uno de los factores por los que muchos consideramos comprar productos con esta tecnología.
La seguridad que más arriba mencionamos, influye en la reparación o sustitución del producto. Si un panel LED tiene un módulo que falla, ese dejará de emitir luz pero seguirá funcionado y podrá ser reparado más adelante.
Sin embargo, en el caso de los módulos de neón, si sufren algún daño debes repararlo o reemplazarlo de inmediato.
Esta respuesta es simple: el LED utiliza menos energía para encender un cartel o decoración. Los grandes paneles de neón, en ocasiones pueden llegar a requerir 15.000 voltios para funcionar (aunque los actuales consumen menos).
En el caso de los LED, para el mismo tamaño necesitan solo 24 voltios. Esto puede ser determinante si tienes pensado comprar o instalar una pantalla grande en el interior de tu casa, en la fachada de casa o donde tú quieras.
Sin embargo, si lo que tú necesitas es un letrero comercial, un objeto de decoración o un panel pequeño, la eficiencia del neón y del LED es muy similar, por lo que podrías escoger el que más te guste.
En este caso lo que más influye es el tamaño. Para pantallas grandes exteriores, los paneles LED son bastante más económicos que los de neón. Sin embargo, para los carteles, pantallas o productos más pequeños entre LED y neón la diferencia de precio es mínima.
Pero si quieres comprar un panel de iluminación o un rótulo, no te puedes fijar exclusivamente en el precio de compra: el mantenimiento y la vida útil también son factores a tener en cuenta.
Hablando de vida útil, es mucho más probable que un letrero de neón dure más que uno LED (sin contar reparaciones o reemplazos). Los paneles que utilizan tecnología LED emiten la misma cantidad de luz durante hasta 100.000 horas.
En cambio, aunque el cambio de un tubo de vidrio en un rótulo de neón es más complicado, su duración se puede extender por años (aunque su intensidad sí que se va reduciendo).
Los rótulos de neón o las pantalla LED se diferencia sobre todo en su mantenimiento. El LED es simple, no tienen gases, tubos de vidrio, problemas con el argón o mercurio y además no se gastan (aunque pueden fallar).
Por el otro lado, los rótulos elaborados con neón necesitan mayor mantenimiento . Van perdiendo luz y color conforme pasa el tiempo. Eso se traduce en cambios de tubos, gas, o incluso sustituciones.
Una apreciación importante. Si el clima del lugar en el que quieres instalar el rótulo de neón es frío (que hiele o nieve habitualmente), esto influye bastante en lo comentado antes. A menor temperatura, más riesgo de rotura y accidentes.
Además, para el cambio o arreglo de los neones necesitarás un profesional capacitado que atienda los problemas de mantenimiento. Esto supone seguridad pero también un gasto adicional que igual no contemplabas.
A continuación, te mostramos en una tabla las principales ventajas de los paneles LED frente a los de neón.
VENTAJAS DE LOS RÓTULOS LED |
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Menor necesidad de mantenimiento |
Mayor resistencia ante golpes |
Utiliza menos 20 veces menos energía |
Trabaja con voltaje bajo de 12 vatios frente a los 15.000 del neón |
Precio mucho más económico en productos de gran tamaño |
Emiten menos calor |
Tres veces más delgados que los rótulos de neón |
No hay una respuesta clara en cuanto a qué tipo de cartel o rótulo es mejor para ti, eso depende de tus preferencias personales. Ten en cuenta todos los factores que te hemos destacado anteriormente.
Nuestra recomendación, basándonos en la eficiencia energética, es utilizar rótulos LED (que de apariencia son prácticamente iguales). Se podría decir que son la evolución más práctica de los neones.
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