Las terrazas de nuestras viviendas son un espacio que muchas veces no se aprovecha al máximo, algo que se podría solucionar si las cerramos y utilizamos durante todo el año. De esta forma, no importará cuáles sean las condiciones climáticas, llueva o truene podrás usar tu terraza.
En función del tipo de terraza, el presupuesto que tengas y la zona en la que vivas podrás instalar un cerramiento u otro. Todos ellos permiten integrar ese espacio en tu salón, cocina o habitación para que lo uses durante todo el año.
Antes de nada, ten en cuenta que, aunque todas las terrazas pueden cerrarse, el resultado o los beneficios que consigues no siempre son iguales. Por ejemplo, si el espacio que vas a ganar es un metro cuadrado o poco más, no merece la pena que hagas esa inversión.
De lo contrario, si dispones de un espacio de unos tres metros cuadrados cerca de la cocina o salón, con un cerramiento podrías utilizar ese espacio para relajarte, organizar comidas o simplemente disfrutar del solecito un día de invierno sin congelarte.
Aunque ya hemos mencionado alguno, aquí te vamos a recopilar los principales beneficios o ventajas que tiene hacer un cerramiento en tu terraza o patio.
Por desgracia, y antes de que sigas leyendo, tenemos que advertirte que hacer un cerramiento no es algo barato. Esta instalación necesita materiales de calidad para aislar bien el espacio, lo que cuesta bastante dinero.
Puede variar en función del tipo de cerramiento y el sistema (si se pueden abrir o no) pero todos ellos cuestan miles de euros, por lo que tienes que estar seguro antes de lanzarte a ello.
Antes de realizar cualquier obra que afecte al exterior de un edificio (sobre todo si es en una comunidad) tienes que consultar los permisos y licencias necesarios. Para tener todo en orden vete al ayuntamiento de tu ciudad y que los administrativos te den la legislación urbanística.
Existen diferentes sistemas para cerrar tu terraza, algunos quitan más luz, otros tienen una capacidad aislante mayor…Descúbrelos todos y escoge el que más se adapte a tus necesidades y gustos.
Antes de pasar a los cerramientos, es importante elegir qué muebles habrá en su interior y dónde se ubica dentro de tu casa. En función de esto tendrás que elegir un tipo de apertura u otro de las ventanas.
Si no tienes pensado unificar el salón y la terraza, existen cerramiento que cuentan con un sistema para recoger las hojas en zigzag en un extremo y así puedes conectar ambos espacios.
En caso de que sí quieras incluir el espacio de la terraza a tu hogar, de forma literal, tendrás que tirar el muro que la divide del salón, cocina o estancia. Tendrás que unificar los suelos, techo, pintarla del mismo color que el interior, instalar enchufes y colocar luces.
Además, tienes que ponerte en contacto con el seguro de la casa porque el aumento de metros a cubrir en la póliza puede afectar al precio anual. Si tienes ya todo claro sobre el cerramiento de terrazas, sigue leyendo para conocer las formas más comunes de hacerlo.
Este tipo de cerramiento de terrazas es perfecto si quieres seguir disfrutando de las vistas, solecito y sensación de exterior en tu terraza. Permite que uses durante mucho más tiempo ese espacio y lo podrás abrir en los meses cálidos y sin lluvias. Eso sí, este tipo de cerramiento no cuenta con la aislación térmica necesaria.
Las cortinas de cristal al fin y al cabo son paneles que se mueven de forma abatible o corredera. De esta forma se pueden recoger en un lado sin que ocupen mucho sitio. Para instalarlo tendrá que realizarlo un profesional y hacerlo a medida. Además, incorporan un sistema de seguridad para bloquear los paneles.
Por lo general, este tipo de terrazas se implanta en lugares anexos a la fachada o el salón y que tiene unas dimensiones grandes, por lo que sigue siendo un espacio de terraza.
Este es el estilo más tradicional de cerrar una terraza. Son ventanas que llegan hasta el suelo o se colocan a media altura. El uso principal es el de ganar espacio dentro de la vivienda para aumentar la cocina, salón o habitación y que no se pierda aislamiento térmico ni acústico.
Esto puede variar en función a la elección de ventanas que hagamos, el tipo de apertura, los vidrios que se instalen y demás opciones de los materiales.
Existe otra opción para hacer un cerramiento de terrazas: utilizando toldos. De esta forma podrás ganar intimidad y te protegerás del sol. Este sistema puede instalarse tanto en el techo como en los laterales.
No escatimes en gastos con los tejidos del toldo. Existen diferentes tipos en función de tus gustos y necesidades (perforados, automáticos, fijos, con cajetines de protección…). Sea cual sea el que instales, si es de buena calidad tendrá más vida útil y te ofrecerá mejor aislamiento.
Existen sistemas que incluyen sensores de lluvia para que no te preocupes si no estás en casa cuando comience la tormenta, el toldo se recogerá solo. Esto también se puede aplicar al viento y a la luz para alargar la vida del toldo.
Algo que debes tener en cuenta antes de hacer un cerramiento de terraza es el presupuesto y lo que te vas a gastar.
Tipo de cerramiento | Precio aproximado por m2 |
Cortinas de cristal | 350-500€ |
Cristal y perfilería (integrada con obra) | 4.000€ |
Toldo (motorizado) | 250€ |
Todos estos precios son orientativos, por lo que existirán materiales más caros y baratos, pero con esta aproximación tienes la capacidad para decidir que sistema de cerramiento de terrazas se adapta más a tu presupuesto.
Elijas cual elijas, todos estos ofrecen un mínimo de aislamiento térmico, por lo que podrás ahorrar dinero en calefacción y aire acondicionado ya que no será un punto de fuga. Por tanto, esta inversión a largo plazo te beneficiará en la factura.
Si quieres extender todavía aún más ese ahorro a toda tu casa, lo mejor que puedes hacer es tener una tarifa de luz eficiente. En EnergyGO sabemos bastante de eficiencia, por lo que te recomendamos que te pongas en contacto con nosotros en nuestra web o llamando al 900 622 700.