Los mares y los océanos suponen el 70% de la superficie de nuestro planeta. Cuidarlos es esencial, ya que son uno de los ecosistemas más grandes, además de un regulador climático y meteorológico.
Sin embargo, el ser humano parece que está haciendo todo lo contrario y, en lugar de protegerlos, los contamina.
El uso de combustibles fósiles, el consumo masivo de pescado y la utilización de plásticos son solo algunos de los problemas que afectan a este tipo de ecosistemas. Pero ¿qué pasaría si pudieses reducir todo esto con pequeñas acciones en tu día a día?
Muchas personas piensan que para disminuir la contaminación deben realizar un gran esfuerzo, pero no es verdad. Estos datos pueden cambiarse con acciones muy sencillas. Por ello, te vamos a contar cómo proteger los mares y océanos desde casa.
El cambio climático y el aumento de la temperatura están provocando cambios en la vida marina. A esto se suma que nosotros no hagamos nada para combatir este efecto. Es más, somos culpables de gran parte de la contaminación de estos ecosistemas.
Muchas personas piensan que es el Gobierno o las grandes industrias los únicos que pueden frenar el cambio climático. Pero no es del todo cierto. Nosotros mismos podemos proteger a los mares y océanos desde casa.
Las pequeñas acciones marcan la diferencia. Llevando a cabo las siguientes recomendaciones, ayudarás a reducir su contaminación. Son tareas fáciles de cumplir, por lo que ya no hay excusas para ayudar al planeta.
Un estudio de diferentes científicos en la revista Advances in Atmosferic Sciences muestra que, en 2022, la temperatura de los océanos ha aumentado 10 zeta julios (10 julios a la 21, o 0,005266 grados a la 21).
Los científicos afirman que el aumento de CO2 y el consumo energético perjudica a la vida marina, lo que se conoce como acidificación. Esto da lugar a un aumento en la temperatura de los mares y a diferentes catástrofes naturales.
El consumo de minerales fósiles como el carbón o el petróleo también provocan un aumento en la contaminación y en la temperatura del planeta.
Nosotros contribuimos a esta contaminación. Utilizamos estos materiales fósiles para crear y consumir energía. Entonces te preguntarás cómo puedes cambiar todo esto desde tu propia casa. ¡Muy sencillo! Reduciendo el consumo energético.
Para ello, puedes coger el transporte público en lugar del coche o, incluso, ir en bicicleta o andando. También, puedes cambiar las bombillas de tu casa por unas de bajo consumo y apagar las luces que no utilices.
Con estas acciones ayudarás a reducir la energía que consumas y, por tanto, disminuirás la contaminación de los mares y océanos.
La sobrepesca supone un gran problema para la vida marina, de hecho, termina con ella. ¿En qué consiste este proceso? Se da cuando la pesca de animales supera a su capacidad de reproducción.
No te estamos pidiendo que dejes de comer gambas. Sin embargo, es importante que reduzcas el consumo de pescado de forma masiva, es decir, sin comprar de manera abusiva este tipo de productos.
Además, también debes revisar el etiquetado de la comida. En ella, podrás observar si han utilizado procesos sostenibles. ¿Cómo lo sabrás? Buscando el sello MSC. Esta etiqueta muestra que los productos se han adquirido de manera sostenible.
Según la fundación Aquae, el 80% de la basura que existe procede de plásticos tirados por las personas. Esto tiene consecuencias desastrosas para la vida de los animales marinos y, a largo plazo, también para la nuestra.
Por ello, es importante que reduzcamos el uso del plástico. Algunas de las acciones que podemos llevar a cabo es utilizar bolsas de tela, reutilizar las botellas de plástico o usar recipientes no desechables.
Es lógico pensar que si queremos cuidar de los mares y océanos no compremos productos que puedan provenir de ellos. De esta manera, no afectaremos a este tipo de ecosistemas.
Por lo tanto, si ves joyería que está hecha de conchas o corales, ¡no la compres! De esta forma no perjudicarás al ecosistema marino.
Seguro que más de una vez te han dicho que no dejes el grifo abierto. La sequía de los mares y océanos es uno de los principales problemas medioambientales. El cambio climático está provocando un calentamiento global y, por lo tanto, genera escasez de agua. Esto se da sobre todo en zonas áridas.
Por ello, debes evitar malgastar agua. ¿Cómo? Pues no dejando el grifo abierto si no lo estás utilizando, llevando a cabo duchas cortas, reutilizar agua siempre que puedas, etc.
Al ser tan fácil como pulsar un botón y hacer que la basura desaparezca, el retrete se ha convertido en la basura favorita de muchas personas.
El papel higiénico, compresas y colillas son residuos que acaban en el mar. Con una pequeña papelera en el baño conseguirás que esa basura no termine en los océanos y ayudarás a reducir la contaminación de estos ecosistemas.
Estas vacaciones has decidido irte de crucero y estás pensando en todas las consecuencias negativas que puede provocar. Pues no te preocupes. No hace falta que cambies tus planes, pero elige la opción más ecológica. Aun así, si puedes, hacer otro tipo de viaje sería mucho mejor.
Si vives cerca de la playa o de un río y has decidido hacer un picnic con tus amigos, acuérdate de recoger todo después. La basura que se quede en la orilla puede acabar en el mar y los animales son los primeros que lo sufren. Además, contamina la propia agua.
Con estas pequeñas acciones podemos llevar a cabo grandes cambios. Si quieres ayudar a mejorar el medio ambiente debes saber cómo proteger a los mares y océanos. Esto también te ayudará a ti mismo. ¡No lo olvides! Dependes de ellos para seguir viviendo.
EnergyGo te da todas las formas para reducir la contaminación y ayudar a frenar el cambio climático. Puedes visitar nuestra página web o llamarnos al 900 622 738.