Tipos de calderas: características y cuál elegir en casa

01 Febrero 2024 13:00

Ahorrar energía y cuidar el medioambiente es mucho más sencillo de lo que parece. Detalles como cambiar la caldera o reciclar tus electrodomésticos de casa por otros más sostenibles pueden marcar la diferencia. Descubre qué tipos de calderas hay, características y cuál elegir para reducir tu consumo de electricidad.

Tipos de calderas y cuál elegir en casa

¿Tu caldera tiene más de 15 años? Si la respuesta es sí, puede que haya llegado el momento de cambiarla. Eso sí, antes de comprar una, en este artículo vamos a explicarte todo lo que necesitas saber para elegir bien: tamaño y potencia, tipo de combustible o instalación son algunos requisitos imprescindibles.

Que tu caldera tenga demasiados años puede tener una repercusión muy negativa en cuanto a su rendimiento y gasto de energía. Por eso, antes de que pueda estropearse de forma inesperada, lo mejor es sustituirla por una nueva. Estos son los tipos de caldera que hay, según el tipo de combustible, y sus características:

Caldera eléctrica

Entre las ventajas de este tipo de caldera podríamos destacar que no existe riesgo de escape de gas. Por eso decimos que es uno de los sistemas de calefacción más sostenibles que hay.

No obstante, las calderas eléctricas necesitan de una gran potencia para funcionar y esto hace que sean más caras que, por ejemplo, las calderas de gas. Lo bueno es que no utilizan ningún combustible, por lo que son mucho más limpias que otro tipo de calderas y no contaminan el medioambiente.

Caldera de gas

A diferencia de la caldera eléctrica, el sistema de calefacción de gas puede utilizar gas natural o gas licuado de petróleo (GLP). Este último es una mezcla de butano, propano y propileno. Nosotros te recomendamos el gas natural, ya que es más sostenible y contamina menos que el gas licuado de petróleo.

Por suerte, las calderas de gas de última generación son cada vez más limpias y respetuosas con el medioambiente, ya que liberan menos cantidad de CO2 a la atmósfera. Dentro de este tipo de calderas están:

  • Caldera de condensación. Es más eficiente que otros sistemas de calefacción de gas, por lo que son las más utilizadas en la mayoría de hogares. También pueden usar gasoil. Además ayudan a reducir la emisión de gases y puedes ahorrar hasta un 30% de energía.
  • Caldera estanca. Aunque no tiene tanta eficiencia como la caldera de condensación, sí ha evolucionado en los últimos años. La combustión de gases se produce en una cámara totalmente hermética, pero tiene un tubo exterior y un ventilador para que no contamine tanto.
  • Caldera atmosférica. Este tipo de calderas fueron prohibidas el 1 de enero de 2010 por el Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios. Estas calderas no ofrecían un nivel mínimo de eficiencia energética. Además, el riesgo por intoxicaciones era elevado.

Caldera de gasoil

Mientras el gas se suministra en estado gaseoso, el gasoil se encuentra en estado líquido. Además, el gasoil se produce a partir de combustibles fósiles derivados del petróleo. Por este motivo, no son muy recomendables.

Sin embargo, las calderas de gasoil de última generación son más sostenibles que las antiguas. Aunque si puedes elegir, será mucho mejor que instales una caldera de gas natural.

Caldera de biomasa

Dentro de las calderas de biomasa, la de pellets es la más eficiente y sostenible con el medioambiente. Esta funciona con residuos forestales, leña, astillas y otros restos de madera.

También conocidos como biocombustibles, estos contaminan mucho menos que los combustibles fósiles. No en vano, se trata de uno de los sistemas de calefacción que más cuidan el medioambiente.

Por otro lado, tienes las calderas de leña. Aquí el combustible principal que utilizan es la madera. Las desventajas de estas calderas es que no ofrecen mucha autonomía, ocupan gran espacio y necesitan un mantenimiento constante.

Eso sí, puedes utilizarlas con suelo radiante. En ese sentido, estas ofrecen un gran confort a tu vivienda y puedes combinar la caldera de leña y el suelo radiante si prefieres optar por un sistema de aerotermia.

No obstante, este tipo de caldera tradicional ha ido evolucionando hasta llegar a la caldera de pellets. Esta última brinda una mayor eficiencia por su poder calorífico, además de utilizar un combustible más sencillo de encontrar y menos pesado.

Como te decíamos al principio, todas estas calderas se clasifican según el tipo de combustible. Recuerda que también es muy importante que tengas en cuenta otras características, como tamaño y potencia de la caldera o instalación.

En cuanto al tamaño de la caldera, las casas más pequeñas (menos de 80 m²) necesitarán una sistema de calefacción de, al menos, 20 kW de potencia. Sin embargo, si tu hogar es más grande (entre 90 y 120 m²) es aconsejable una potencia de 25 kW. Para casas aún más grandes, puedes aumentar la potencia hasta 30 kW.

Si quieres instalar cualquier tipo de caldera, lo más rápido y seguro es contactar directamente con un profesional. Ahora bien, en EnergyGO te recomendamos elegir la caldera más ecológica y que mejor se adapte a tus necesidades. Cualquier duda, visita nuestra web o llámanos al 900 622 500 y deja que te informemos.

LO + TOP
Artículos relacionados